Un amor poco convencional.

Capitulo 6.

Narra Daniel. 

 Era lunes y las clases ya habían acabado y me disponía irme directo a casa. No le había dirigido la palabra a Johanna desde esa tarde en su sala en la que tuvimos sexo el día anterior. Ella me dijo que me quedara pero yo casi salí huyendo de ahí por la incomodidad y el asco me daba a mi mismo, había engañado a Miranda con un mi amiga, una amiga que era mayor de edad y la podían meter a la cárcel por "abuso", aunque en realidad yo tengo parte de la culpa y además de todo había traicionado mis principios de guardarme hasta casarme o amar a alguien.

- ¿Estas evitándome?- pregunto Johanna sacándome de mis pensamientos, se veía de verdad angustiada,  al parecer me había seguido un buen rato y no me había dado cuenta.

-No- conteste agachándome de hombros y tratando de sonreir.

- Yo creo que sí, no me has hablado y cada vez que me acerco a ti actúas raro, ¿Es por el sexo?

Al escuchar decir sexo me sonroje como tomate y la piel se me puso de gallina.

- no quiero que nuestra amistad se rompa, o que se vea afectada por lo que hicimos el otro día.

- Mira Johana no creo que debamos hablar del tema, finjamos que nunca paso ¿ok?

-pero si paso, a mi si me gusto y ¿a ti?, yo no vi que te negaras a no besarme esa tarde, además hiciste tu "trabajo".

- Ósea que ¿piensas que yo lo quería?

- Claro que sí

 ¿Qué carajos le pasa ha esta chica?, sí había pensado en besarla algunas beses, pero tener sexo con ella.... bueno sí.

- mira Daniel, la verdad es que no sé que fue lo que paso, pero fue bueno, aunque no quiero que eso destruya mi amistad contigo, ¿seguimos siendo amigos verdad?

-Si todo esta bien de verdad, te lo prometo.

 La verdad es que yo quería mucho a Johanna y nuestra amistad era muy importante para mi y no quería que lo ocurrido esa tarde destruyera mi buena relación con ella, ella era mi mejor amiga y  como habíamos convivido todos los días durante 2 meses se había convertido en alguien importante en mi vida diaria.

-¿tu estas bien?

-sí, solo nerviosa por nuestra amistad.

- bueno no te preocupes, todo esta bien de verdad, solo no hablemos del tema por favor, no creo que se bueno para nuestra salud mental y emocional- ella rio aunque la verdad es que lo decía en serio.

Narra Johanna

Después de 2 semanas, Daniel y yo habíamos olvidado el incidente en mi casa y nuestra relación había vuelto a la normalidad, yo ya no iba a su casa tan seguido y solamente nos veíamos en la escuela, aunque para ser sincera yo seguía pensando algunas veces en esa tarde erótica.

 Era un viernes y no nos habían dejado tarea así que me fui a la plaza a comer una hamburguesa, pero me tropecé con un chico casi tumbando su comida, note que era muy alto, un poco bronceado cabello lacio y con los ojos grises.

- Perdón.

-No hay problema, ¿Bienes sola?.

- Sí, me llamo Johanna.

- Peter- me dijo asintiendo con la cabeza.- Ya que vengo solo también ¿te gustaría sentarte conmigo a comer?

-Si claro solo deja que pido y te alcanzo.

Pedí una hamburguesa hawaiana, una Coca y me fui a sentar junto a Peter, el no había tocado su comida siquiera, me esperó, cuando llegue el abrió su comida y  prácticamente la ataco y para que no se sintiera incomodo  desvié la mira.

- Entonces Johanna ¿que estudias? o ¿trabajas?.

-Estoy terminando el bachillerato en la "AJT"- conteste mientras habría el papel que envolvía la comida.

- Yo igual estoy terminando el bachillerato aunque en escuela publica.- dijo tomando de su agua natural.- Yo tengo 18 y ¿tu?

- yo igual aunque tú te ves mas grande.

- lo sé, es el tamaño, uy no que mal- dijo mirando su reloj.- la función de cine a la que voy a entrar ya va a empezar, me tengo que ir, ¿me das tu numero?

- si claro- tome una pluma de mi mochila y le escribí mi numero en el brazo.

- te llamare, lo prometo- tiro la basura en el sesto y se fue corriendo. Esto era perfecto, un chico que me quitara de la mente a Daniel y que me ayudara a superarlo. Tire la basura y me fui a mi casa, todo el camino con una sonrisa como si hubiera ganado un premio de la academia, estaba feliz.