Gabrielle era una chica desempleada y con una pésima vida amorosa, pero todo eso cambio cuando su hermano le consiguió trabajo en una prestigiosa empresa. Ahora ella tiene otro problema ¡Su jefe es el mejor amigo de su hermano! Por el cuál había ten...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Saber que Luke tenia sospechas acerca de mi enamoramiento por Nick era una noticia demasiado fuerte que provocaba que los colores se me subieran a la cabeza, pero enterarme de que mi nuevo jefe era Nick, el mejor amigo de Luke y mi amor platónico de toda la vida era una bomba de noticia.
Estaba sin palabras, no sabia que era exactamente lo que tendría que contestar o cómo actuar después de esta confesión.
Siempre había pensado que era una total experta en ocultar mis sentimientos y ser discreta acerca de mis enamoramientos, pero ahora resultaba que era todo lo contraria y que hasta mi propio hermano había sospechado de todo.
«Eres increíble, Gabrielle»
Pero eso no se comparaba en nada a todo esto que sentía justo en este momento al saber que Nick seria mi nuevo jefe, todo esto era tan complicado, me sentía tan abrumada de sólo pensar que el amor platónico de toda mi vida seria mi jefe, no entendía como le haría para verlo sólo d manera profesional sin que las mariposas de mi estomago me atacaran.
—Entiendo que debes de estar en shock por toda esta información, pero después tendrías tiempo para eso ahora hay importantes cosas que hacer.
La mire sorprendida ¡¿Qué otras cosas importantes tenia que hacer el día de hoy¡? Eran demasiadas confesiones en un solo día para tener que soportar otras cosas más.
—¿A qué te refieres, Abby?— le pregunte y a ella se le apareció una sonrisa traviesa en el rostro, la conocía bastante como para saber que esa sonrisa solo quería decir que algo se trai entre manos —No pensé que fuera mala idea aceptar el aventón.
Jamás se me había cruzado por la cabeza que sólo por subirme al auto con Abby terminaría con una fuerte confesión acerca de mi nuevo jefe y con la vergüenza de mi vida al saber de las sospechas que tenia mi hermano acerca de mis sentimientos hacia Nick.
Puso una cara de ofendida —¡Ey! Escuche eso.
—Esa era la idea.
—Regresando al tema central, te dije que Nick es tu jefe, pero no te dije el motivo por le cuál no se presento el día de hoy y son buenas noticias para ambas.
—¿Por qué son buenas noticias para ambas?
—Para ti porque es un boleto para tu felicidad, y para mí porque tú eres mi mejor amiga y cuñada y quiero que seas feliz.
—Abby ¿podrías dejarte de rodeos y decir lo que tienes que decir?
Estaba desesperada por saber las "buenas noticias" que me tenia que decir, la incertidumbre me esta carcomiendo por dentro desde la noche anterior, Luke y Abby eran unos expertos en dejarme con intrigas e incertidumbres acerca de todo.
¿Qué no sabían lo mortal que puede llegar a ser la curiosidad? La leyenda cuenta que la curiosidad ha acabado con las sietes vidas de los gatos.
—Que enojona Gabrielle, deberías de pensar en hacer yoga dicen que es buena para el estrés.
—Abby.— estaba a solo unos segundos de estrangularla hasta que me soltara la sopa completa.
—Nick estaba comprometido hasta hace unas horas.— después de que esa frase saliera de su boca deje de escuchar lo demás.
Sentí como si un balde de agua fría me hubiera caído encima, Nick estaba comprometido, y eso sólo significaba que él se había enamorado de otra mujer y que la había encontrado tan perfecta como para unir el resto de su vida a la de ella, despertar a su lado todas las mañanas y besar sus labios a cada minuto. El amor de mi vida estaba enamorado de otra, cada suspiro del pasado ahora se convertía en un sollozo, las mariposas ahora se sentían como serpientes que me mordían por dentro dejando su veneno y las aceleraciones de mi corazón ahora se convertían en estrujones que dolían hasta lo más profundo de mi alma.
Nick ya no era mío, una sonrisa amarga se coló en mi rostro y otro sollozo se me escapo, la realidad era que él nunca había sido mío y esto sólo me lo confirmaba. Me abrace a mí misma y apreté los labios tratando de controlar mis sollozos, parecía una adolescente hormonal con su primer corazón roto, pero no había algo que pudiera hacer para tratar de evitarlo.
Era difícil olvidar a tu primer amor y mas cuando has pasado la mayoría de tu vida a su lado, pero Nick no era mi primer amor, sino que era el único. Durante todos estos años había tratado de sacarlo de mi corazón y de no pensar de él, pero el corazón siempre es mas fuerte que la razón, y siempre de alguna manera se colaba en mis pensamientos torturándome por aquella vez que lo deje escapar de la manera más patética.
—Tranquila, shhh, ya pasara.— escuche las palabras de consuelo que me daba Abby pero eso no cambiaba nada de lo que esta sintiendo en este momento.
Necesitaba un momento a solas para poner en orden mis ideas y sentimientos, y eso era solo algo que la soledad de mi habitación me podría dar.
—Llévame a mi casa, necesito estar sola.— le susurré separándome un poco de ella.
—¿Estas, segura? No quiero que pases por esto sola.
—Sólo llévame, Abby.— me voz salió mas fuerte de lo normal y al ver la expresión que puso había me maldije por eso —Lo lamento, no quería sonar tan dura.
Abby ya no comento nada más y me llevo a mi departamento, todo el camino nos mantuvimos en silencio cada una inversa en sus pensamientos, yo que no podía con el dolor que me estaba asfixiando presionando el pecho y la culpa por haberla tratado mal.
Cuando estaciono el auto afuera de mi edificio suspire aliviada, sólo quería corre hacia mi departamento y refugiarme en mi cama, sufrir en la soledad de mi habitación y atormentarme por mi propia cuenta.
—Gabrielle...
—¿Qué sucede, Abby? En verdad me muero por llegar a mi habitación.
—No te he contado toda la historia, cuando vi como te afecto la noticia preferí esperarme.
¿Faltaba aún más? Cruce los dedos para que esta vez fueran noticias buenas.
—Nick estaba comprometido hasta hace unas horas, él rompió su compromiso porque su prometida lo está engañando y lo acaba de descubrir hace algunas horas.
Iba a morir por sufrir tantas impresiones en un solo día, ya veía mi funeral y la frase "murió por tener un corazón débil que sufre por cualquier sorpresa" grabada en mi tumba.
¿Engañar a Nick? Esa mujer debería de estar ciega y loca, nadie en sus cinco sentidos podría engañar a un hombre cómo él, esa mujer no se lo merecía.
—No entiendo a que quieres llegar con todo esto.
—Ten.— me paso un papelito con una dirección escrita —Se que tu sabrás que hacer con esto.
Apreté el papelito en mi mano, sentía como quemaba mi piel, y sabia perfectamente de quien era esta dirección.
—Piénsalo Gabrielle, mereces ser feliz y si sucedieron así las cosas es porque el destino tenia otros planes para Nick.— eso fue lo ultimo que dijo antes de irse.
Despareció dejándome más confundida de lo que había estado en mi vida.
¿Qué otros planes tenia el destino para Nick? ¿yo entraba en esos planes?
Tendría que olvidarme de todo este desastre, mañana no me presentaría en el trabajo y me pasaría todo el día buscando empleo, trataría de sacarme del corazón y de la mente a Nick y continuaría con mi vida como debía de ser desde un principio.
¿Pero si pensaba hacer todo eso por qué me encontraba afuera del departamento de la dirección que me había dado Abby?
