-No pasa nada, no hace falta que me defendáis, yo me iré a casa y listo. -Le explico al hombre.
-Pues por eso, ¡es ciega!, no es una persona. ¿Qué más da lo que le hagamos?. -Dice Marcos.
El mundo se me cae encima, me derrumbo. Es verdad, soy ciega, tengo una discapacidad, y en esta sociedad hay algunos que creen que por tener algún problema, no somos personas, no tenemos vida, ni sentimientos.
-¿Perdona?, vosotros sí que no sois personas, no, vosotros ¡sois monstruos!, ¿pero cómo sois capaces de decir tal barbaridad?. -Defiende la chica.
-Cariño, déjalos, no saben lo que hacen. -Le dice el hombre cercano a mí a su pareja.
-No Daniel, déjame tú, esto es una barbaridad. -Persiste la chica.
Lloro, lloro de la impotencia, de pensar, ¿por qué esto a mí?.
-Venga sí, ahora ponte a llorar, ¿no necesitarás que te consuelen tus papis verdad? jajajaja. -Ríen mientras se marchan.
Lloro, y vuelvo a llorar, y cada vez más fuerte.
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Cuánta Oscuridad
Historia Corta¿Nunca hemos pensado en cómo seria una vida sin oscuridad?, ¿sin peleas?, ¿sin insultos?. Nuestra personaje Claudia, una chica de tan solo 15 años, que os contará su dura vida siendo ciega, y entre otras situaciones. Es una pequeña historia.