Maldito jefe

Maldita mentira

SANTIAGO

Hace 3 semanas  de lo ocurrido con Victoria, desde ese día que  no la he vuelto a ver me enteré que al día siguiente vino por sus cosas, yo ya tenía lista su renuncia junto con el dinero que le correspondía por haber trabajado este tiempo en empresas Ferri, hace dos semanas que no quiero ver a nadie y no dejo de tomar, del trabajo a la casa y de la casa a al trabajo así es todos los días,  no quiero ver a  nadie menos a mi familia desde que se enteraron que deje a Victoria estaban molestos conmigo y con la duda de porque la dejé hasta ahorita no les he dicho el motivo, no quiero que me tengan lastima porque una vez más se burlaron de mi.
No se nada de ella, y hay días que me dan ganas de ir a buscarla pero no tiene caso me engañó con Raúl, ese imbécil desde que me restregó esas fotos con Victoria, ya no quise saber de él lo que se es que dos días después se regreso a Italia y ahora se que se acaba de comprometer con su novia, pobre mujer pero bueno haya ella, mi familia en este momento debe estar celebrando el compromiso y con eso es posible que pierda la empresa y pase a manos de Raúl, mi tía ha de estar feliz mientras yo aquí hecho una mierda.

VICTORIA

Ya casi es el mes desde que Santiago me echo de la empresa y de su vida y lo extraño más que a nadie en este momento pero no tiene caso luchar por alguien que no me tiene confianza, la señora Rebeca me estuvo marcando pero nunca respondí sus llamadas.
Hace dos semanas saque a mamá del centro de salud y regreso donde estaba antes también decidí mudarme y estar cerca de ella así podría ir a verla casi diario, ya la otra semana empiezo a trabajar como ayudante de un abogado, voy a estar a prueba ya que ese no es mi ramo, no es de lo que me gradué pero necesito trabajar y despejar mi mente ya no pensar en Santiago, que estúpida yo pensando en el y él ni se ha de acordar de mí.

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SANTIAGO

-¿Que haces aquí abuelo?

-Tienes dos días que no vas a la empresa, es un desastre tienes que ir

-Para que si esa empresa no será más mía la voy a perder me da igual así que déjame solo

-Para que para que te sigas embriagando y eches a la basura todo lo que has logrado, no señor levántate ahora mismo, báñate y te vas a la empresa no puedes estar así por ella y si tanto te afecto ve a buscarla y dile que la amas, porque eso es lo que pasa tú amas a esa mujer más de lo que amaste a Pamela , y eso de amarla lo dudo si la querías pero también era como un capricho

-No me la mensiones abuelo, ella y Victoria son iguales las dos solo estaban conmigo por interés

-Victoria se veía que te quería

-Ahora tu la defiendes, cuando no la bajabas de una trepadora y no te equivocaste, supo sacarle provecho a la situación sabiendo que todo era una farsa porque todo era una mentira abuelo que todos se creyeron menos tú

- Te equivocas Santiago yo también creí que ella te quería y no creo estoy seguro que ella te quiere, si todo esto empezó como una mentira no te voy a negar que no me hizo nada de gracia, pero desde que la presentaste como tú novia algo había diferente en ti ustedes se llevaban mal pero de algo estoy seguro ahí había química, atracción y es el primer paso para una relación. Ni en tus ojos ni en los de ella había ese brillo pero con el paso del tiempo eso cambió y ni tú ni ella se dieron cuenta.
El día que la defendiste en Italia de Raúl y de mí ese día cambio algo en ti y te aseguro que en ella también.

-¿Sabias que era una mentira desde el principio?

-Lo intuía pero no estaba seguro porque lo admito hacían muy buena pareja, ella es una mujer hermosa e inteligente y sobre todo se da su lugar y sinceramente no creo que te haya engañado con Raúl, te diré algo pero

-Pero nada abuelo vete

-Necesito que me escuches creo que

- Lárgate abuelo déjame en paz no te quiero escuchar ni ver

VICTORIA

Y estoy una vez más aquí en mi antiguo departamento, la razón que estoy aquí es porque me faltó llevarme algunas cosas así que vine por ellas y entregarle las llaves al dueño para que lo pueda rentar a alguien más. También aproveche para ver a mi amiga Caitlin descuide mucho nuestra amistad desde que empezó está mentira, cuando la vi me desahogue le conté toda la verdad sobre el ogro.

Ya tenía casi todo listo solo me faltaba algunas cosas del clóset, comencé a sacar todo y me encontré con el hermoso vestido de novia que había comprado para mí boda,  recuerdos se vinieron a mi cabeza y sin darme cuenta ya estaba llorando, nunca debí aceptar esa mentira, lo odio por haberme convencido por chantajearme.

No dejaba de llorar limpiaba mis lágrima y más me nublaban mi vista, me levanté y salí del departamento necesitaba despejar mi mente necesitaba un poco de aire. No sé cuánto camine pero llegué a un parque y me senté en una de las bancas más alejadas, seguía pensando en como acepte tremenda mentira.

Pero no voy a negar que esa maldita mentira la disfrute desde el principio hasta que me fui enamorando de él, en que momento caí a sus encantos, cualquiera que me vea pensará que estoy loca por hablar sola

-En el momento que el cayó primero ante tus encantos.
Alguien se paro enseguida de mi

-¡Señor Santiago!

-Hola Victoria,¿ me puedo sentar?

-Claro, ¿que hace aquí?

-Es un parque y vine a pensar igual que tú en los errores que hemos cometido

-Me tengo que ir con permiso señor

-No espera tenemos que hablar de Santiago y sobre todo pedirte una disculpa de cómo te trate este tiempo, no debí ser tan cruel contigo pero yo solo quería lo mejor para mi nieto y ahora se que lo mejor para mi nieto eres tú