Mi destino eres Tu

Capitulo 6

Todos comíamos en paz y en silencio, así era desde que mi hermano se fue, siempre en la mesa se hablaba de lo bien que se portaba Marcus, de lo buenas calificaciones que tenía Marcus, de la carrera que estudiaría Marcus, bla bla bla Marcus, jamás hablábamos de mí, y si lo hacíamos era para compararme con mi hermano, lo bueno que era él y lo malo que era yo, mis padres decían que debía de ser mas como mi hermano, solo cosas así, por eso cuando se fue yo lo disfrute pero poco tiempo después no porque no tenía ni siquiera con quien pelear, después de un rato mama comenzó a hablar de cosas sin sentido como la comida pero mi padre tomo la iniciativa y empezó a hablar

-Estuvo delicioso amor, gracias- le da una linda sonrisa y la besa, mi cara hace un gesto porque no me gusta su demostración de amor tan repentina.

-Gracias amor- le devuelve el beso-

Mi padre se dirige a mí y toma una bocanada de aire fresco antes de hablar

-Hija el colegio llamo diciendo que no tenían escuela, esperamos que llegaras media hora tarde pero cuando no llegabas nos preocupamos te buscamos por todos lados, en todos los hospitales- tomo mi mano y vi como una lagrima quería salir pero la detuve

-No sabes cuánto nos dolía no encontrarte, jamás te dimos por muerta aunque eso nos decían pero tuvimos fe en que regresarías, luego llamamos a todos en la escuela y por ultimo encontramos los números de tus amigas y ella nos contaron lo que paso....- me miraba fijamente igual que mi madre

-Si hija ellas nos dijeron lo que te hicieron esos dos jovencitos y ya pusimos manos en el asunto tú no te preocupes- mi madre lo decía orgullosa por lo que había hecho

-Luego nos dijeron que saliste corriendo y una persona les dijo que te habían llevado al hospital donde te encontramos al fin- suspiraron al mismo tiempo mis padres, yo solo asentí

-Gracias por hacer todo eso por mí Los amo- les agradecí sinceramente no pensé que se hubieran tomado tantas molestias por mi

Pero algo en mi me decía que la plática no terminaba ahí

-Hija lo que hicieron esos dos rufianes no estuvo nada bien, yo lo entiendo y por eso hicimos que sus padres se enteraran, dijeron que pagarían el cuaderno y que pedirían una disculpa- esas palabras de mi padre me alegraron totalmente, ya era hora que pagaran algo de lo que me hacían

-Pero también nos ayuda a darnos cuenta de algo todos nosotros- hablaba mi madre calmadamente

-Darnos cuenta de que mamá- pregunte desconcertada, no sabía que podría ser

-Si hija date cuenta que el escribir, el vivir en otro mundo no te está dando nada, no digo que estuvo bien que se burlaran de ti pero date cuenta que realmente es tonto lo que escribes y no te sirve de nada- de todo lo que mi madre dijo solo pude escuchar "es tonto lo que escribes y no te sirve de nada" es mi pasión es suficiente para mi

-Que ahora los defiendes- le conteste casi gritando estaba demasiado molesta como para no responderle

-No le hables de esa manera a tu madre- dijo mi padre

-Ella realmente tiene razón, date cuenta ya que eso de escribir no te dejara nada, no sirve solo es fantasía de la cual debes salir y enfrentarte al mundo real- realmente no entendía a mis padres como podían decirme eso

-Tienes que dejar ya eso en paz y darte cuenta lo que debes de hacer realmente, como pensar que universidad vas a escoger- cuando mi madre dijo esas palabras, ya sabia para donde nos llevaría esta conversación.

-Qué carrera vas estudiar- Papá

-Te iras con tu hermano- Mamá

-No vivirá aquí para estarla vigilando-Papá