Historias Cruzadas

Vecino nuevo

Lo único imposible es aquello que no intentas

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 Al despertar veo que Mariana y Aurora aún siguen dormidas, me levanto sin hacer ruido y me pongo a buscar mi uniforme, saco la camisa amarrilla y la corbata azul junto al pantalón gris, ahora que lo pienso últimamente no he llevado la falda, pero bueno así está bien

Después del baño, me seco el cabello y veo que aun siguen dormidas, tomo mi teléfono y mi mochila, bajo al comedor en donde se encuentran mi madre y la tía Margaret platicando mientras toman café

-Buenos días- Digo colocando mis cosas al lado de la silla de mi madre

-Buenos días- Dicen al mismo tiempo- Tu desayuno está en el microondas- Avisa mi madre, me dirijo a este y saco el plato para ponerme a comer

-Y bien Dalia- Habla mi tía- ¿Te iras a la escuela es tu auto?

-Pues sí, claro si es que no lo van a utilizar, también me puedo ir caminando

-Mira, este es el plan ¿Qué te parece que te lleve Jackson? Te dejaría en la escuela y después iría por las compras, mientras tu estas estudiando planeamos ir a caminar y comprar unos helados, después te iríamos a buscar y vendríamos caminando todos en familia

Me quedo callada al escucharla, no es que me moleste que vayan por unos helados o caminar, pero debo admitir que no me agrada la idea de que me vayan a buscar todos

-Qué le parece si yo voy a hacer las compras después de clases, no tengo nada que hacer me serviría de distracción. Además, pasarían más tiempo juntos, ustedes con mi mamá

Ellas se miran unos segundos y después mi tía asiente, la verdad me alegro ya que es verdad no tengo nada que hacer y no solo después de la escuela, sino que mi horario después de clases está totalmente vacío

-Está bien, iré por el dinero, ahora regreso-Asiento y veo como ella sube las escaleras, regreso la mirada a mi madre y automáticamente se borra la sonrisa que tenia

-Vas a convivir con tus primos quieras o no- Advierte

-Lo sé, pero a pesar de lo de anoche son desconocidos, prefiero ir los conociendo poco a poco y cuando ya haya más confianza todo será más fácil ¿Sí?

Ella suelta un pequeño suspiro y asiente, me enseña una pequeña sonrisa de tranquilidad y eso hace que me dienta feliz, no estoy acostumbrada a nada de esto.

Al salir de mi casa subo a mi auto y dejo a mi mochila en el asiento del copiloto, prendo la pantalla de mi teléfono para ver la hora, tengo 10 minutos de sobra

- ¿Dalia? -Escucho que alguien dice asiendo que salte del susto en el asiento, volteo hacia la vente para ver al responsable y veo a un chico al igual que yo con uniforme, su cabello es negro y sus ojos marrones. Lo conozco, pero... ¿De dónde? Digo es obvio que, de la escuela, pero no lo recuerdo. Abro la puerta y me bajo quedando enfrente de él

-No sé si me recuerdes, soy Nick el amigo de Leo- Bueno ahora sé dónde lo conocía, Leo me presentaba amigos nuevos casi a diario, no sé cómo le hace para recordar tantos nombres

-Nick, claro que te recuerdo ¿Cómo estás? ¿Tú eres el nuevo vecino? -Miento, no sabía que decir así que esto es lo primero que salió de mi boca, como siempre sin pensar

-Bien, eh si, nos mudamos ayer. Oye al verte se me ocurrió que al ser vecinos podíamos ir juntos a la escuela, en mi auto ¿Te parece?

- ¿Estás seguro? Bueno lo digo por los rumores, ya sabes cómo corren los chismes- Él sonríe y suelta un pequeño suspiro divertido

-Pues a mí no me importa lo que digan... -Lo miro unos segundos y no borra la sonrisa

-Está bien, iré a dejar las llaves ¿De acuerdo?

-Si, yo voy por mis cosas- Ambos asentimos y lo veo alejarse, saco mi mochila y mi teléfono del carro y cierro, entro y al llegar al comedor veo a todos sentados desayunando

-Dalia, ¿Se te olvido algo? -Pregunta mi madre al verme

-No, lo que pasa es que tengo un pequeño problema y no podré ir a hacer las compras- Mi madre deja las cosas que tenía en las manos y se acerca a mi

- ¿Qué paso hija?... -La interrumpo antes de que empiece su cuestionario

-No es nada grave ni malo, si no que un compañero se ofreció a llevarme y no me pude negar ya que va a ayudarme con unas actividades que no entiendo muy bien y pues no podré hacer las compras- Miento, okey no creo que eso y que se ofreció a llevarme y traerme sea un buen motivo, pero con lo de la actividad no me dirá nada

-Está bien, ya me había asustado. Yo are las compras no te preocupes- Le entrego el dinero y me vuelvo a despedir, al salir veo a Nick dentro de un deportivo negro como el de Nathaniel

Al subir al auto dejo mi mochila en mis piernas y el me mira, si esto ya es algo incomodo

- ¿Por qué llevas pantalón? -Pregunta con un tono burlón que por algún motivo me hace sonreír

-No sé, me siento más cómoda supongo ¿Por qué?

-Solo pregunto- Fija la vista en el camino y comienza a conducir- Creo que te veo rara porque no estoy acostumbrado a verte con el pantalón, digo vamos en el mismo salón, pero no hablamos

Entonces vamos en el mismo salón, ¿Cómo no lo recordé? Vamos en el mismo salón y no lo conocía o bueno no lo recordaba

El prende el estéreo y en todo el camino lo único que se escuchaba aparte de la música éramos nosotros repitiendo la letra, a veces volteaba a verlo y el ya me estaba mirando, aunque a pesar de eso me gusto el viaje, fue agradable...

Después de ponernos de acuerdo para vernos a la salida comenzamos a caminar hasta llegar al salón, al entrar veo a Nina, me despido de Nick y tomo asiento al lado de ella, sin decir nada empiezo a sacar mis cosas y me quedo mirando el resto del lugar

-Lo siento- La escucho susurrar

-No, lo entiendo no debí aceptar, pero fue más uno orden que una petición- Ella suelta una risa y me mira

-Dalia, Te aré una pregunta, pero por favor responde con la verdad- Ahora que fue lo que hice

-Si, dime- Me recargo en la mesa y la miro fijamente ¿Qué paso?

- ¿Lloraste? -Me quedo callada para darle a entender que tiene que ser más específica, supongo que lo entiende ya que continúa- Cuando te enteraste de lo de Leo, ¿Lloraste?