capítulo 2

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 Consecuencias

Despertó cuando escuchó unos fuertes golpes en la puerta, tiró la mano a lo que supuso que era una mesita de noche y tomó su celular en el cual vio la hora, ocho y media de la mañana. Se volvió a recostar nuevamente, se sentía sumamente agotado, necesitaba dormir, era muy temprano.

— ¡Joder Bulma, abre la puerta!– al escuchar el nombre de la peliazúl fue que notó algo o mejor dicho alguien durmiendo sobre su pecho.

— ¿Qué mierda? —se preguntó.

— ¡Bulma, despierta! —se volvió a escuchar.

Estaba realmente sorprendió...¿Qué se suponía que hacía con ella en esa cama y peor, desnudos?...recuerdos de la noche anterior azotaron su mente.

— Nada mal para tu primera vez, azulita —fue todo lo que pudo decir.

Se levantó como pudo alejándola de su cuerpo, buscó su ropa y se colocó los pantalones para luego abrir la puerta.

— ¡Vegeta! —exclamó muy sorprendida cuando vio que quien habría la puerta era el moreno— No me digas que tú... —miró la cama y vio a su amiga, estaba arropada pero si Vegeta estaba con ese aspecto y apenas con ropa eso solo significaba una sola cosa— ¡Oh maldición, te acostaste con ella! —Con rapidez se acercó a la cama— Bulma —la llamó. Le tocó el rostro— Despierta, nos tenemos que ir —dijo— Por lo menos usaron protección —le dijo al ver varios preservativos usados en el piso.

Abrió los ojos con lentitud y se sintió mareada.

— ¿Dónde estoy? —preguntó desconcertada.

— En la casa de Zarbon —le dijo al ayudarla a sentarse mientras se tapaba— Vamos vístete, tenemos que ir a mi casa, tu hermano a llamado como tres veces preguntando por ti —se alejó y del piso recogió su ropa interior y su vestido y se lo dio.

— Ten Shin Han —su cabeza le daba vueltas y no entendía nada.

— ¡Ayúdame Vegeta, no te quedes ahí paradote! —espetó.

Él maldijo al cerrar la puerta y acercarse, tomó a Bulma en brazos y Launch se encargó de vestirla.

— Vegeta... —susurró ella a la misma vez que se ponía pálida.

Retrocedió, se alejó de él, muy borrosas imágenes vinieron a su mente.

— Dime que no pasó... —sintió las lágrimas acumularse es su ojos.

— No pasó nada —sonrió.

— ¡No te burles de mi miserable! —le gritó.

— Me dijiste que te dijera que no pasó nada —dijo con un tono burlón y ella lo odio por eso.

— ¡Te aprovechaste de mí! —espetó.

— No, no me aproveché —se defendió.

— Maldito miserable —se acercó y le abofeteó fuertemente la mejilla.

— Niñata de la mierda —le gritó. Launch se tuvo que interponer al ver la clara intención del moreno.

— Eres una basura —dijo Bulma— Jamás odie a nadie como te odio a ti.

Difícil de AmarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora