Capítulo XVI

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(Capa roja continuaba relatando la historia de cómo conoció a Lobo, de aquella niña feliz que era se había convertido en una niña sin sonrisa, sólo tenía en su mente dolor, rencor, tristeza y soledad pero algo más fuerte era que quería vengarse de su padre, lo odiaba por haberla alejado de Raúl y a él lo odiaba porque ya no fue a buscarla como un día se lo prometió

Se sentía devastada porque pensaba que aquél joven quien era el amor de su vida sólo había jugado con ella, y ese dolor era demasiado fuerte para aceptar las cosas)

Roberto.- Mmmm entonces Capa, no le hiciste caso a tu abuela a lo que ella te decía por lo que me estás contando

Capa roja.- Pues se podría decir que sí, dime ¿Tú que sentirías si te traicionan? Bueno lo debes de saber mejor que yo jajajajaja

Roberto.- ¿Qué insinúas? Conmigo no te andes con rodeos Capa, yo no soy Raúl para tener compasión por ti

Capa roja.- Jajaja espera espera jajaja a mí no me espantas con tu disque poder sobrenatural jajaja es más creo que hasta un error cometiste al venir aquí, sin siquiera antes saber de mí

Y no, no es amenaza; simplemente que no te creas invencible querido, todos tenemos algo que demostrar, y si tú eres un vampiro... ¿Qué crees que soy yo? Jajaja así que guarda silencio, escucha y si quieres tu venganza debes hacer caso a lo que te diga

Roberto.- Sólo por eso me detengo capa, porque quiero que me ayudes a acabar con Raúl, me las tiene que pagar, y no quiero quedarme con las ganas de cobrarle cada una de las lágrimas que he derramado desde la muerte de Abril

Capa roja.- Bueno pues deja sigo al fin que aún queda tiempo

(Recuerda)

Como te iba diciendo, aquella niña inocente se había ido para siempre, la rebeldía llegó por completo y ya hasta a mi abuela le decía cosas de hecho cuando ella me hizo la capucha, le dije que no quería nada de ella, la capucha estaba linda tenía un brillo hermoso pero mi coraje me cegaba y hacía cosas que a ella le lastimaron

La verdad tenía deseos de morir, de vengarme, de no saber de nadie, de perderme y no regresar jamás ya que mi vida no era nada desde que mi padre me dejó abandonada ahí con la abuela...

Y si, también pedí ayuda; también grité mil veces su nombre maldiciendo todo, recuerdo que me escapé de casa de la abuela lo único que llevaba era la capucha que me había regalado, no quería regresar ya; llegué a un río donde me vino a la mente lo que había pasado con Raúl semanas atrás, me quedé sentada en la orilla y escuché una voz y al instante un reflejo en el agua

Hombre.- Hola niña, como que ya se está haciendo tarde para regreses a tu casa ¿no crees?

Capa roja.- Pues tal vez y sí, pero no tengo nada que hacer en casa, es más yo ni casa tengo así que me da igual si me quedo aquí o allá o en donde me caiga la noche

Hombre.- Vaya, veo que eres de agallas niña, veo también en tu alma que tienes coraje, algo o alguien te ha lastimado tanto que te ha roto el corazón, dime ¿quién fue mi niña?

Capa roja.- Sí, así es; dicen que de quien menos te esperas viene la traición y yo lo he comprobado, mi padre mi ejemplo a seguir aquel hombre respetable, responsable y cariñoso, se ha quedado en nada por lo que me hizo aquel día

Y mi novio, bueno ex novio porque igual sólo jugó conmigo me utilizó para acostarse para saciar sus ganas, me prometió un amor real y puro, fue pura habladuría

Hombre.- Y dime algo, ¿no te gustaría cobrarles el daño que te han hecho?

Capa roja.- La verdad quisiera hacerle pagar hasta lo último, que derramen sangre por lo que me han hecho, que rueguen piedad ante todo el daño que les haga pasar, que imploren morir para dejar de sufrir

Hombre.- Pues yo te voy a ayudar mi niña, he escuchado tus llamados y aquí vengo a ti, te ayudaré a que realices todo lo que quiera, ¿te parece?

Capa roja.- Si, y ¿qué tengo que hacer a cambio?

Hombre.- Bueno pues es muy simple, a cambio me firmas un papelito con tu sangre para seguir con el contrato, yo te doy lo que quieres y tú me ayudas a mí y a mi amiga

Capa roja.- ¿Amiga? ¿Contrato? ¿Qué tipo de contrato?

Hombre.- Mi amiga ahorita viene anda atendiendo unos asuntos pendientes con un lugareño de por éstos rumbos jajaja, y el contrato es simple ya te dije, te ayudo, me ayudas y ya

Capa roja.- Suena interesante todo eso, acepto

Hombre.- Sólo tienes que saber algo niña, ya no hay vuelta atrás, no te podrás arrepentir de lo que hagas, lo que deseas se te cumplirá pero también puede que llores en algún momento

Capa roja.- No me importa, no creo que haya más sufrimiento que el de ahorita, así que estoy lista para firmar ese famoso contrato del que tanto hablas

Hombre.- ¡Perfecto! El día que menos lo esperes vendré a buscarte, y ese día ya no habrá nada que pueda evitarlo

(Se retira con una carcajada, aquel hombre que ofreció ese contrato era el mismo diablo que ofrecía su ayuda, Capa roja cegada por el coraje y el dolor no dudó ni un momento en decir que sí, tal vez era lo mejor ó tal vez vendría lo peor después de esa plática)

Continuará...

LOBO "La historia jamás contada" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora