Travesti después de la escuela

El Gran Juego.

Por fin es Viernes, hoy se decide todo, y el tiempo parece ir más rápido de lo normal. Sin darme cuenta estoy parado en la parte de arriba de las gradas viendo como se desenvuelve el partido.

Puedo ver entre la audiencia, a mi izquierda, en unas filas abajo, a mi hermana que esta con Nadia, en la primera fila, a mi derecha, esta Vanessa hablando con su novio, Devanny esta en el campo junto a las demás porristas que parcen estar calentando, haciendo algunos estiramientos o alguna clase de hechizo que nos haga perder el juego para hacerme su animadora, mientras que José esta junto a mi. Nadie parece voltear a verme, pero aun así siento todas las miradas encima.

Vamos abajo 1-0 quince minutos antes de que termine el partido, pero aun hay esperanza. Podemos ganar!

Nuestro equipo tiene muchos tiros al arco pero ninguno ha entrado en la portería, algo esta mal, pero sierpe nos recuperamos en el ultimo minuto, pensé estar al filo del asiento hasta el final, pero Angel, capitán de nuestro equipo, anota el primer gol de nuestra parte. A llegado mi héroe! Y me da un minuto de descanso

El marcado a los 90 minutos era 1-1 empesará la ronda de penales.

Angel es el único que mete gol de nuestro equipo y nuestro portero parece estar algo confundido, siempre salta en dirección contraria al balón y le han metido 2 goles.

Marcador final 3-2 y perdemos el juego.

-Perdimos! –Es lo único que alcanzo a decir antes de quedar con la mente en blanco.

Puedo escuchar algunas risas que llegan a mis oídos como un taladro, pero no distingo rostros. Solo puedo ver las escaleras por las que bajo mientras abandono las canchas.

Mi padre esta afuera del partido y al verme sabe perfectamente lo que ha pasado, solo se limita a decir lo que tantas veces a repetido –Si ere un hombre, debes cumplir con tu palabra.

Al llegar a casa, mi madre se entera de todo por la sonrisa de mi hermana y mi cara tan pálida –No te preocupes –Dice ella –Mañana te convertiré en señorita.