Capítulo 6 | Tras las rejas

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—¡Eres tú!—Gritó la rubia con tono alegre después de observarme unos segundos, haciendo que diera un pequeño salto en el asiento.—Ya veo que aún sigues con tus juegos extraños donde experimentas con tus emociones o algo así. En fin, pronto sabrás quien soy, llámame cuando lo recuerdes.

—¡No entiendo nada, por favor ayúdame!— Saqué mi mano por la celda y tomé su brazo con desesperación— Sujetos extraños me amenazan. No se que hacer, la policía no me cree.

—Lo siento, no puedo. Trata de recordar todo, hallarás la solución.— La chica se zafó de mi agarre, y se fue por el pasillo.

No tenía ni idea de quién era y menos de a qué se refería con aquello de los juegos y emociones. Pero al menos me había dado una pista. Llegué a pensar que trabajaba allí, pero deseché esa idea. Parecía que había ido de visita y por su atuendo casual deduje que era así.

Me aferré a las rejas de la celda donde me habían traído, luego de que me detuvieran por "consumir" y "robar". Desde mi asiento podía ver a Porter y a los demás policías bebiendo café y observando en sus computadoras alguna información irrelevante. Había estado allí unos 19 minutos y antes de entrar me habían dicho que si no podía recordar mi nombre ni el de mi familia harían una prueba con mi huella dactilar para saber mis datos personales, proceder a contactar a mis padres o familiares (Verificarían, además, si era cierto que estaban desaparecidos) y posterior a eso iría al hospital para chequear que me estaba sucediendo. El problema era el tiempo.

Seguí pensando y analizando las cosas que me habían sucedido, esperando a que alguien viniera y me sacara de allí, pero sin darme cuenta, ya había caído la noche. Los policías se iban de uno a uno a sus casas, todos se habían ido menos él y un guardia sentado en una esquina durmiendo con la boca abierta.

-Pssss.. Psss!- Trataba de llamar la atención de Porter, haciendo un sonido con los labios. El miró a los lados confundido y siguió leyendo algo.- ¡PSSSS! Inútiiil, em..digo... Señor policía, estoy aquí!- Me miró y dejó de hacer lo que estaba haciendo para acercarse a mí.

-¿Por qué no te duermes?.. eres muy fastidiosa.-Lo miré con disgusto- No me estés diciendo Señor, aún no piso los 30's. Enserio me hace sentir mayor.

Un pensamiento invadió mi cabeza: ¿Por qué me estaba tratando como si me conociese de hace años?

- Ahg, sinceramente..-Me levanté, y lo miré de cerca-Señor, por favor saqueme de aquí, usted no sabe lo que viví estos últimos días y como hice para llegar hasta la ciudad..

─Mira, vas a salir de aquí.. solo tienes que esperar. No entiendo porqué estás tan ansiosa.─Porter se volteó para dirigirse a su escritorio.

─¿Acaso parece que miento? , te explicaré toda la historia al derecho y al revés, no verás ningún fallo.

─ No quiero escucharla.

─ Si, si quieres.

─Que noooo.

─ ¿Ni un poquito?

─ No, ni un poquito.

─Me amenazaron, matarán a mi familia.─Porter se quedó parado, sin hacer ningún ruido. Se me humedecieron los ojos .─Créame por favor, se lo ruego, le diré todo con detalles

—AAgh .. esta bien.

—No se hacer, no me siento a salvo afuera. Un chico tenía una pistola en su casa, pero no creo que fuera policía y yo acepté su ayuda creyendo que era bueno.. y tengo hambre, me duele la cabe.. espera, d..dijiste que me ayudarás?

—Mira, no tengo el permiso de sacarte de aquí, pero este es mi plan: te abriré la reja, iremos a un lugar para conversar sobre el nuevo plan y si alguien me pregunta dónde estás, les digo que te trasladaron a otro lugar. Caso cerrado.

La Séptima VezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora