Sangre Feroz >[Taekook]<

Capítulo 30

HoSeok y JiHoon se encontraban comiendo en un restaurante cerca del Starbucks sintiendo una mirada encima de ellos.

Mientras ellos desayunaban en plena mañana charlando de todo lo que se habían perdido.

-¿Te gusta SeokMin?. -pregunto el menor arqueando las cejas al mismo tiempo que abría la boca con sorpresa

-Si, somos algo asi como enamorados. -bajo la mirada mientras sonreia levemente -que tal tu pequeño, alguna dama por ahi?. -se atrevio a preguntar para quitar el ambiente pesado que se comenzaba a formar

-Dama no, E-es un Chico, Hyung. -dijo algo sonrojado al pensar en el que le gustaba

-Asi que un chico eh?, ¿como se llama? ¿Es mayor? ¿Que edad tiene? ¿Va a la misma universidad que nosotros?. -le hizo muchas preguntas al mas bajo como si fuera su padre pero en realidad era su mejor amigo de esos inseparables

-Hyung ya deje de hacerme preguntar. -fruncio el ceño pareciéndose mucho a Yoongi

-frunciendo el ceño de esa manera te han dicho que te pareces a Yoongi Hyung?. -lo miro con cara de sorprendido pero le causaba ternura

-aish Hyung no me compare. -se hace al ofendido aun frunciendo el ceño pero más divertido

El pequeño lo miro cruzándose de brazos, haciendo un ligero puchero pero luego le dio un golpesito en el hombro y ambos rieron.

Taehyung acorralo en un árbol al fondo del bosque al vampiro menor sonriendo de lado.
Lo que el menor no sabia que estaban ah espaldas de la mansión Kim y el mayor sabia que no había nadie en su casa ya que no sentía algún olor familiar de su manada.

Tomo la mano de Jungkook y da la vuelta dentro de todos esos gigantescos árboles llegando al frente de sus aposentos.

El menor abrió los ojos de sorpresa pero este abrió la puerta y se adentró cerrando la puerta una vez que el menor estaba adentro y se sentó en el sofá seguido de su pequeño vampirito en su regazo.

Jungkook sintió los besos húmedos que le daba el pelirrojo en el cuello y este le dio más acceso haciendo que el contrario lama & muerda dejando marcas rojizas que probablemente mañana serán de color moradas oh lilas con verde...

-Hyung hoy yo quiero ser el de arriba. -Susurro cerca del oido de su mayor con un tono sensual

-Vampirito seamos sinceros tu no tienes pinta de ser el de arriba y yo no seré el de abajo. -sonrió de lado, sujeto su cintura con un poco de más fuerza y con cierto toque de ser posesivo

-no sea malo Hyung. -hizo puchero que al mayor le resultó demasiado tierno -dejeme ser el de arriba solo hoy andele. -comenzo a removerse encima del miembro del mayor por el berrinche que hacia

-No quiero que mi trasero sea profanado. -el agarre de su cintura fue bajando hasta llegar a sus nalgas y apretarlas haciendo un brusco vaivén haciéndolo jadear mientras se acercaba a su oreja para hablar -pero yo si quiero profanar el tuyo de nuevo. -susurro y mordió el lóbulo de su oreja escuchando lo jodear

Vaya que este licántropo sabia como calentar a su Dongsaeng.~

El pelirrojo beso los labios del contrario lentamente cosa que el menor correspondió casi con desespero colocando sus brazos alrededor de su cuello y profundizar el beso.

Ambos chicos se despojaron de la ropa quedándose en su ropa interior mientras el menor se movía sobre el pene erecto de su mayor.

-Ahh~ Hyung~ Por favor~. -gemia mientras comenzaba a dar saltitos en su regazo sacándole uno que otro gruñido de placer a su mayor

El pelirrojo fue bajándole el bóxer a su Dongsaeng hasta quitárselo, rozar la Punta de su miembro en la entrada de este subiendo y bajandola dándole espasmos al menor.

-Hyung!... N-no sea así. -lloriqueo al sentir como lo torturaba untandoselo entre las nalgas y no lo penetraba como el quería -Por favor, solo hágalo ya!. -dijo jadeando y suplicando que se la meta con desespero

-¿hacer que Bebé?. -susurro con la voz gruesa por la excitación y mordió su cuello un poco sacándole un gemido que lo puso más duro de lo normal

-Follame, joder follame como solo tu sabes hacerlo!. -se escondió en el cuello ajeno sonrojado por el desespero de tener sexo con su mayor, este solo sonrío arrogante y adentro su extencion en la entrada palpitante del menor