Después de ser capturado por SHIELD, Spider-Man logra escapar de sus garras de la forma más inesperada, no sin antes llevarse consigo una hasta ese momento desconocida sustancia que la NASA había entregado a esta corporación para su análisis. La sus...
Mientras yo estaba en la cima de la Iglesia Eddie Brock entraba a la misma. Él me odiaba, a mí y a Spider-Man.
El ambiente era frío, tétrico, húmedo. Truenos y relámpagos caían sin reglas ni reloj.
La lluvia no cesaba, y yo veía ese oscuro traje, ¿realmente sería la causa de mi comportamiento o al final era yo que me dejaba llevar por el momento? Cualquier cosa que fuera, todo lo había hecho yo. Matar a Marko, maltratar a Gwen, olvidar a May. Era una basura. ¿Cómo podía ahora hacer memoria a mi tío ahora?, ¿cómo?, con toda la mierda que había hecho.
Se hicieron las 10:00pm, las campanadas de la Iglesia comenzaron. El sonido que estas generaban me dolía, las ondas... ¡realmente me dolía! Pero a la vez... ¡el traje perdía estabilidad!, era como si el sonido alterara su estructura molecular, literalmente se despegaba de mi cuerpo, ¿pero cómo?, se suponía que era de metal. A menos... a menos que no fuera el Iron Spider, si no otra cosa. Pero ¿qué?
Sea lo que sea, el sonido funcionaba, el traje se desprendía de mí. Comencé a jalarlo con mis manos, cada vez se quitaba más. Me impactaba a mí mismo contra paredes, me rasgaba en ellas. Al desprenderlo me dolía todo, como si desgarraran mis venas, como si desgarrara mi alma En mi desesperación me estrellé contra la campana, haciendo que sonara más fuerte.
Eddie se acercó a la zona de las campanas, pues el sonido había llamado su atención. Al llegar vio como me retorcía en la cima, y de inmediato me reconoció. Él ya sabía que Peter Parker era Spider-Man.
El sonido se agudizó aún más. Lancé dos telarañas al traje y lo jalé hacia afuera, me costó mucho esfuerzo pero ya estaba, el traje se había ido. Lo último que quedaba se alejaba junto con el resto, era una sustancia gelatinosa y algo volátil, negra en su totalidad con brillos azules y morados. El esfuerzo me había cansado y no preocupé en recuperar la sustancia.
Bajé de la Iglesia y me dispuse a caminar hasta el hospital, estaba perdido mentalmente. Crucé la calle sin mirar y un auto estaba por atropellarme pero sorprendentemente mi sentido arácnido me alertó del peligro y salté para salvarme, igual que en los viejos tiempos. ¡Mis poderes habían vuelto! Y sin necesidad del traje, era como si usarlo hubiera reestablecido mi ADN arácnido.
Seguí caminando hasta el hospital, aún llovía. En una pantalla se reportaban las últimas noticias del día.
"Noticia de último minuto, SHIELD junto con los Avengers están realizando un operativo para capturar de una vez por todas a Spider-Man, después del accidente de anoche con el arenero. Se recomienda que no salgan de su casa por su seguridad. Seguiremos informando"
Los Avengers y SHIELD me querían. Pensaba que ya era hora de entregarme, de hacer lo correcto.
Me volví a casa, entré a mi habitación y saqué del baúl el desgarrado traje de Spider-Man, si me iba a entregar al menos intentaría conservar mi identidad.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
