Narra Clara
_ Entonces, ¿solo lo dejó entrar?_pregunto Marí repasando lo que le dije.
_ Exactamente. Después de todo ya sabes como se ve_observé mientras señalaba la pantalla que contenía el perfil completo de Jace.
_ Está bien, pero ¿no debería de haber venido ya?_destacó Marí un tanto preocupada al parecer. Quité todo rastro de aquella información de la computadora para luego responder.
_ Supongo que primero paso por su casa, no importa iré a encargarme del jardín_anuncié sonriente. Es mi parte favorita del día.
_ Sigo diciendo señorita Clara eso debería de hacerlo yo_comentó Marí a modo de regaño y un tanto divertida por la situación.
_ Tranquila me gusta hacerlo, siempre fue una tradición en mi familia_comenté mientras me dirigía al patio donde se encuentra mi jardín personal.
Y no miento. Desde pequeña siempre lo que más quería era ayudar a mi madre en el jardín. A pesar de nuestra postura nunca contratamos un jardinero. Era como una pequeña tradición nuestra. Un momento que compartir. Un momento madre e hija. Muy pocas veces nos ayudaba papá, ya que no le gusta la tierra. Pero por nosotras lo hacía con gusto. No puedo quejarme de que el trabajo consumiera a mis padres. Porque ellos siempre tenían tiempo para mi.
Los extraño tanto, pienso mientras riego algunas rosas. Todas blancas. Mis favoritas y de mi madre. Cuando termino subo unas escaleras para llegar a pequeñas macetas que cuelgan del techo. Sin darme cuenta estoy llorando. No, no ahora. Debo ser fuerte por ellos. Aunque parece que pasó tanto tiempo. En realidad esto no es nada. Esto no sé compara con lo que vendrá. No debería estar llorando. Pero... ¿Porque a mi?, ¿Porque a nosotros?,¿Qué les hemos hecho?. Tengo la familia más amorosa del mundo. No me falta nada. Ellos no sé merecen esto. Nadie merece algo así. ¿Porque la gente debe ser tan cruel y codiciosa?. Je les aime. Sé que ellos lo saben bien._ Je jure que je reviendrai et ils me paieront_murmuré para mi misma decidida a cumplir mis palabras._ Bien fait et maintenant je vais arroser les roses_comenté en voz alta. Cuando escuché un sonido detrás de mi.
_ ¡Hey tú!_oí a una voz masculina gritar. Me volteé a ver. Era Jace
_ Mais quoi?_dije olvidando que estaba hablando en francés. Ya que me sorprendió que entrará de esa manera, y su intromisión al momento de mi depresión no me deja pensar con claridad mis acciones.
_ ¿Qué acabas de decir?_iba a responder, pero resulta que también olvidé que estaba en la escalera. Hasta que lo oí gritar._ ¡Cuidado!_gritó un tanto asustado por la situación. Me aferré a las cadenas que sostienen la maceta pero esto no resistirá por mucho tiempo.
_ ¡Attrape-moi!_grité para luego arrogarme hacía Jace riendo por la extraña situación.
_¿Qué?_cuestionó anonadado. Claro que tarde pues ya me había lanzado. Aún así logró atraparme torpemente.
_ Gracias, buena atrapada _bromeé riendo_ Uff eso estuvo cerca_comenté cuando me solté de su agarré. Aunque él no parecía reaccionar. Claro no todos los días se te tira encima una chica a la cual apenas conoces hablando francés.
_ Estás completamente pirada ¿Lo sabes verda?_destacó Jace cuando salió de su shock, mientras se sacudía el polvo inexistente. Parecía incómodo por la situación.
_ Por supuesto es mi mejor cualidad_respondí a lo que me miró con asco. ¿Qué le hice?
_ ¿Qué fue eso que dijiste?. ¿Tratabas de invocar al diablo o algo por el estilo?_cuestionó. Aunque sus deducciones son infalibles me doy cuenta porque necesita clases de francés. Por suerte no sospecha nada extraño.
ESTÁS LEYENDO
Tu Blanco en Mi Negro
Teen FictionElla es la hija del presidente de Francia. Se podría decir que es la niña mas energética, alegre, positiva y amable que a existido pero el pasado de sus padres la pondrá en peligro. En el puesto que tiene a ganado muchos enemigos. Es por eso que dec...