Capítulo 1: El rompimiento. Parte 1

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Narra Abby


Estaba dirigiéndome enojada a la casa de Mauricio, quien es como mi hermano. Una vez se entere de lo que hizo el idiota de Hoagie irá a golpearlo. Me gustaría que lo hiciera, pero mi sentido común me dice que no tenga esperanzas ya que él no es violento.

—Y entonces le pregunte: "¿Quién te hizo ese chupón en contra de tu voluntad?" Pero él me miente diciendo que no sabe quién es la chica. —Me cruzo de brazos molesta cuando termine todo el relato.

Cuando comencé a salir con él sabía que era mujeriego, pero él me había prometido dejar esos hábitos si le daba la oportunidad de tener una relación seria conmigo.

—¿Y cómo sabes que te mintió? —preguntaba mi amigo, recostado comodamente en el respaldo de su silla.

—Lo conozco desde los 7 años, puedo saber cuándo me miente mirando sus reacciones. —Entre otras cosas...

—¿Entonces también sabes cuándo yo miento? —Levantó una de sus cejas mirándome con curiosidad.

—Contigo es más difícil porque no te colocas nervioso, pero aun así tu hermanita puede saber cuándo lo haces.

—a ver... —se sienta correctamente en la mesa levantando sus dedos—. Te diré 3 cosas y tu dime cual es mentira —propone aún con curiosidad.

»— 1) Tengo revistas pornos que nadie ha visto.

2) Tengo fotos de otras chicas semi desnuda en mi celular.

3) Siempre borro mi historial cuando vienes a mi casa.

Me quede mirándolo sorprendida, no imaginé que fuera como los demás chicos en ese aspecto, pero entendí rapidamente que mi idea era la equivocada, después de todo ya no eramos niños. Yo cumplí 15 el mes pasado y él tenía 18 años, lo extraño sería que no le interesara esas cosas. Pero aún asi al conocerlo desde tan pequeño me costaba imaginarlo de ese modo.

—Pensé que dijiste que te bastaba con tener a mi hermana —le reproche, no me llevaba bien con ella pero éramos familia y solo por eso no quería verla sufrir.

—Estoy enamorado de Cree pero nada ha cambiado desde que estamos saliendo, me sigue evitando y tratándome mal, cuando intento tener una cita, me coloca una excusa. —Miraba el techo pensativo—. Me bastaría con tu hermana, si en verdad la tuviera y ese es el problema. —Se oía cierta tristeza y desilusión en su voz.

—Las 3 cosas que dijiste son una mentira —dije de repente sacándolo de sus pensamientos.

—Ja, ja, ja —suelta una pequeña risa—. En verdad me ves como un santo. Abby soy un hombre de 18 años.

—Lo sé, pero eres un hombre enamorado que no se arriesgaría a perder a mi hermana para siempre. —Lo miré con una sonrisa triunfante—. Si tuvieras todas esa cosas mi hermana podría descubrirlas tarde o temprano y terminaría contigo.

Me di cuenta antes por como sonó.

—Mi hermanita me conoce mejor de lo que imagine. —Su celular suena haciendo una pequeña pausa para luego continuar—. Pero si es cierto que tenía todas esas cosas antes de salir con tu hermana.

Mira el mensaje e inmediatamente su cara cambia a una de sorpresa quedándose de ese modo por varios segundos.

—¿Mauricio? —pronuncie preocupada.

—Tengo que irme —dice finalmente cuando se le pasa el shockeamiento corriendo hacia la puerta de su casa.

Llámenme entrometida pero tenía que seguirlo, no había visto esa cara en él desde la vez que tuvo que repetir un curso por su problema con el stress.

Si es contigo sé que puedo enamorarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora