Capitulo 13: Casa-club de "Mistone". Parte 3

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Narra Abby


Antes solo éramos Ritta y yo, pero cuando ella se fue a otra escuela conocí a Mauri. Él en su afán de no verme triste me dijo: «Puedes hacer más amigas, como esa niña de allá». Esa resulto ser Kuki que a su vez me presento a los chicos: Nigel, Hoagie y Wally.

Estar cerca del ultimo me ayudo a crecer como persona porque pude ver los efectos negativos de ser impulsivo. La vieja Abby lo era pero ya no, lo elimine de mi personalidad o eso pensaba hasta que corrí estúpidamente sin pensar, solo sintiendo que debía llegar lo antes posible a Chad.

« ¡Estúpida!», me rete a mí misma en mi mente al detenerme frente a los guardias.

—¿Nombre? —pidió el de mi derecha sacando su celular.

Eran más grandes en persona, intimidaban solo con su presencia pero lo bueno fue que deducir que ocurría gracias a la música suave que se escuchaba en el ambiente. De noche debía ser como una discoteca pero con reservaciones, es decir privado.

—Soy... —No podría decirle mi identidad, obviamente no estaba anotada en ningún lado—. Soy la novia del chico que acaba de entrar, ¿Me dejan pasar?

Ambos se vieron desconcentrados por un momento pero luego hablo el tipo de mi izquierda:

—No importa quien seas si no estás en la lista no puedes entrar.

Mi plan fallo, podría haber intentado diciendo el nombre de Ritta ya que sé que ella ha venido un par de veces aquí, sin embargo si estos tipos saben cómo luce me metería en más problemas.

—Dinos cómo te llamas o vete de aquí, no podemos permitir que impidas el paso a los demás invitados —hablo el primer guardia más serio que antes al notar que no tenía intención de moverme aún.

Tenía que pasar, no importaba que ese lugar no pareciera una sala de tortura, el hecho era que trajeron a una persona en contra de su voluntad, y ahora que sabían que los vi podrían llevarlo a otro sitio en lo que tardaba en ir a la comisaria a denunciar. Para entonces Chad podría estar en camino a otro país o estado como salía en las noticias a veces.

Sentí el nerviosismo a piel viva en cuanto comencé a pensar en ello, entonces ejecute la primer idea que se me vino a la cabeza. Saque mi celular sin dejar de verlos, buscando toda la valentía que pudiera tener en mi interior.

—Si no traen aquí a Chad llamare a la policía.

Rápidamente la mano donde tenía el celular fue sujetada por el que tenía más cerca, todo en mi mente grito: "PELIGRO".

Me entro tanto miedo que la sensación de escalofrió se trasladó desde mi estómago hasta mi garganta.

El tipo no hizo nada más, solo se me quedo viendo con aquellos ojos tan profundos y amenazadores, era como el tigre analizando al conejo que se iba a comer.

Los segundos se me hacían eternos, llegue a recordar todas las veces que Mauricio me protegió de otros chicos para que algo como esto nunca me pasara, finalmente comprendí que incluso si yo creí que era fuerte y no necesitaba a nadie, al final de día para personas como ellos, yo solo era una débil chica que podrían someter a la fuerza.

Cuando lo vi levanta su otra mano cerré los ojos con fuerza, deseando que venga Mauricio a salvarme.

—¿Que sucede aquí? —Abrir los ojos al escuchar una voz conocida, tuve que girar mi cara para asegurarme de que no fuera una ilusión auditiva por el momento.

Si es contigo sé que puedo enamorarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora