He is not my love (JJK) +18

Primera sensación. Estólida.

No puedo explicar lo que sentí cuando lo conocí. No fue amor a primera vista, más bien, lo sentí poco a poco, al darme cuenta de lo diferentes que éramos, pero a la vez nos parecíamos y eso me atrajo hasta atarlo en mi corazón.

¿Qué fue? Tal vez su sonrisa, esa fuckin' sonrisa que me vuelve loca. O su voz, su forma de ser...

JungKook tiene todo lo que puedo pedir en un hombre. Y yo soy la mujer que necesita.

Te amo, te amo, te amo, te amo...

ɷɷɷɷɷɷɷɷ

La lluvia se coló por la ventana de su camioneta sin siquiera darle tiempo de subir los cristales. Cuando lo hizo, su cabello ya estaba húmedo y en su falda, se marcaban las pequeñas gotas de agua.

Musa bufó y tomó su móvil para cambiar la canción. Se giró y suspiró al ver a sus amigas dormidas en el asiento de atrás ¿Por qué tenía que estar conduciendo ella? Quería dormir también.

— ¿Ya llegamos? — Una voz se escuchó desde atrás.

Musa miró por el espejo retrovisor y asintió al ver a HyeJin despertar.

— Pronto, pero hay demasiada gente. — Dijo y bajó el volumen de la radio. — ¿Te desperté? — Preguntó, aunque no estaba avergonzada.

HyeJin negó.

— No, de pronto me dolió el cuello, Mina se recargó en mi clavícula y me sudó la papada.

Ambas comenzaron a reír.

— Estúpidas. — Balbuceó Mina desde atrás, la chica se acomodó en el asiento y volvió a dormir.

Musa estacionó el vehículo a un costado de la tienda y se giró para ver a sus amigas.

— Será mejor que se despierten por completo, nos espera una fila larga. —. Dijo y se desabrochó el cinturón. —. Ahg, ya no tengo batería. —. Se quejó al mirar la pantalla de su teléfono.

Mina se acomodó para verlas, con el cabello revuelto y la mirada perdida.

— Hay un cargador en mi mochila, sácalo. — Musitó y estiró los brazos.

HyeJin abrió la puerta del auto y salió cubriéndose de la lluvia con los brazos sobre la cabeza.

— Estas crepas deben de ser deliciosas, de otro modo, no entiendo por qué hay tanta maldita gente.

— Además, son carísimas. No sé ni porque venimos, debimos haber ido a comprar unas hamburguesas y ya. — Musa bajó el auto y suspiró al ver el mar de gente que había arremolinada delante del restaurante.

Mina salió por fin y sonrió.

— Venimos aquí porque dicen que sus trabajadores son unos sementales. Yo quiero comprobar eso.

Musa comenzó a reír.

— Espero que valgan la pena.

Dijo y sacó un par de paraguas.

(****)

Cuando lograron entrar al lugar, Mina comenzó a rebuscar entre los empleados al más atractivo. HyeJin sonrió al ver en la caja, un muchacho alto con hoyuelos en las mejillas.

— Mira eso. —. Dijo y se acercó al sitio.

Mina asintió.

— Te dije que estaban buenos ¡Musa! Aparta una mesa, iremos a pedir.

La chica asintió sin quejarse y comenzó a buscar una mesa vacía, el lugar estaba limpió, a pesar de tener una gran multitud dentro suyo. Se acercó a la mesa que estaba abandonada al final del pasillo y se sentó.

Sabía que no iba a pasar demasiado tiempo a solas, pero justo en ese momento le hizo tanta falta su celular. Miró a sus amigas quienes parecían haberla olvidado y suspiró. Recargó su mentón sobre la palma de su mano, pensando en no aburrirse, aburriéndose más al intentarlo.

— ¿Puedo limpiar aquí? — La chica levantó la mirada sorprendiéndose al mirar un atractivo muchacho con una franela en las manos.

Asintió débilmente y se inclinó hacia atrás para dejar al chico hacer su trabajo.

El joven le dedicó una mirada rápida y sonrió.

— ¿Sabes? Debes de hacer tu pedido allá, aquí no hay meseros. Sí quieres puedo acompañarte... — Dijo sin dejar de sonreír.

Musa no pudo evitar acariciar la voz de aquel desconocido. Era misteriosa y necesitada. Parecía conocer demasiadas cosas y poseer la elocuencia que a ella le faltaba.

Musa miró el gafete del chico, buscando su nombre.

— Estoy bien, Yoongi. Te lo agradezco, vine con un par de amigas y yo sólo estoy apartando la mesa. —. Respondió.

El chico asintió, guardando la franela en su delantal.

— Bien, entonces creo que lo tienes solucionado. — El chico la miró con otro tipo de sonrisa en el rostro y le dedicó una reverencia rápida, para alejarse caminando.

Musa no supo comprender la actitud veleidosa del muchacho y surgió en ella una sensación estólida que le suplicaba inmiscuirse más, hasta encontrar exactamente lo que buscaba.

Más tarde lo hallaría, pero por desgracia, Yoongi no era el portador de aquella pieza faltante.  

Para

<3 Ya sabes amix. <3