Tony Stark al ser abandonado en Siberia se pone a reflexionar si en verdad vale la pena seguir vivo, pero encuentra su motivo que es el mantener a su familia viva. Visión lo rescato y estuvo en reposo durante 2 meses, cuando esta ya recuperado Fury...
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Antes de que yo muera 2-
Tony ya estaba arreglando sus cosas para la misión, aunque tenía problemas para terminar por que Pepper estaba ahí sacándole todo de el bolso.
-¡no vayas!- grito con frustración.
-Pepper, no tienen a nadie más y es solo una misión de reconocimiento...- contesta el castaño algo molesto, entendía la preocupación de su hermana, pero esto era el colmo ya que el era el hombre de hierro y de podía cuidar solo.
-Tony, te estoy diciendo que tengo un mal presentimiento sobre esta misión...- dijo la pelinaranja mientras que por milésima sacaba las pertenencias de la mochila. Tony ya algo desesperado tomó en brazos a la oji verde para después ponerla como costal sobre su hombro y sacarla de su cuarto.
-Estaré bien Pepper, necesito esto por favor- dijo el castaño antes de cerrar la puerta con seguro.
-¡Tony!- gritó enojada y casi al borde de las lágrimas- ¡Tony! ¡Hazme caso!
A pesar de que le dolía el escuchar a su hermana así, decidió que por esta vez tendría que ignorar aquel sentido de hermano ya que enserio necesitaba salir. Y no nada más para pasar un buen tiempo o algo, si no que necesitaba trabajo, el aire le vendría bien y para ser sinceros es que tenía curiosidad de ir a aquella selva por que no es como si todos los días les dijeran que una nave se estrelló contra la tierra.
Aunque enserio imploraba por que no fuera otra maldita invasion chitauri o algo por el estilo, Tony se quedo tan entrado en su mente que no se dio cuenta de cuando Bruce logró abrir la puerta y entrar a su cuarto, observaba en silencio como el ojimiel estaba ido.
-Tony...-
-¡WAH!- grito con tremenda fuerza Stark, puso su mano derecha en su pecho y respiró profundamente- Brucie boo ¿¡que pretendes que me de un ataque cardiaco!? – se quejó.
Las risas de el castaño con lentes no tardaron en escucharse y eso ocasionó un puchero en el hombre de hierro mientras que se cruzaba de brazos.
-Lo lamento Tony, no fue mi intención el espantarte- dijo entre risas- pero es que Pepper estaba algo histérica afuera diciendo que te irías a una misión, así que decidí en venir a revisar si te encontrabas bien y si es cierto.
Tony termino de acomodar sus cosas en la mochila, revisó en su tableta si ya estaba listo el traje que se llevaría para allá y al ya ver qué todo está en orden es cuando decidió ahora si prestarle toda la atención a su Bruce, quien en todo momento no dejo de esperarlo sabiendo que eso haría Tony. Ya lo conocía demasiado bien y algo que siempre había que tener muy en frente es la paciencia y no hablarle mal o si no perderían toda su atención. Ya estaba comprobado.
