Miedos extensos y ruidosos me hacen difícil la escucha, los pasos parecen incómodos y me amarro.
Suenan las voces en un pedestal que no existe ,que he dibujado con un pilar de inseguridades y me cohibo.
Grito en silencio, gruñe mi alma como queriendo safarse de lo que hay por decir y me censuro.
Pienso, repaso, calculo cada una de las cosas y antes de siquiera una variable me prohibo.
Las palabras se amontonan y la poesía me hace libre, quiero soltarme de mis miedos y al final de mil tormentas, florecer.
ESTÁS LEYENDO
Poemas a la luna
PoesíaCruje el cielo, Llueve poesía, Se embriaga el cielo, Versos, Me embriago yo.