Quinta Estación

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Si tienen dudas sobre la situación de Nayeon y Tzuyu, serán aclaradas aquí.

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La siguiente prueba fue más simple, todas agradecían calladamente que así fuera, ya que aún seguían recuperándose de la últimas. Imágenes de lo habían vivido hasta ahora continuamente se repetían en sus mentes, una más aterradora que la otra.

Después de que la puerta se cerrara, ya nadie dijo nada, todas se habían resignado a lo que fuera a ocurrirles después.

Se recostaron esperando a que las luces se apagaran y el sueño viniera. Soñar era mejor que vivir la realidad. Esa realidad que poco a poco las estaba haciendo añicos.

Luego de algunos minutos todas estaban durmiendo. Soñando cosas alegres, paisajes, personas, enfermedades… en el caso de Nayeon, ese era su sueño, su flashback, una visita que hizo al doctor días atrás.

Nayeon se encontraba de pie frente a la puerta del consultorio, era la segunda vez en esa semana que estaba ahí, la primera fue para realizarse un examen, eso había sido hace dos días, y se preguntó porqué el doctor la había llamado tan pronto, por lo general se tardaban de cuatro a seis días.

Abrió la puerta y la recepcionista le pidió esperar un poco; en las noticias estaba una reportera de cabello corto, con algunos rastros de haber sido trasquilado; piel algo pálida y labios desalineados. ¿Cómo alguien tan desarreglado podía estar dando noticias? Pensó Nayeon. El solo hecho de verla así le quitaba las ganas de ver la televisión.

La presentadora estaba hablando de un suceso bastante particular, alguien había robado diversos animales del zoológico, y en el atraco habían asesinado a varios miembros del personal de seguridad y a un par de veterinarios.

-Oh mi Dios, que horrible. – La joven recepcionista estaba de pie viendo la televisión, con cara de espanto.

Era menor que Nayeon, siempre iba impecablemente arreglada, su cabello recogido y sus labios pintados solamente con un labial de tono natural, poco maquillaje pero bastante eficaz. Kim Ye Rim, era el nombre de aquella joven, pero solían llamarla Yeri.

Nayeon y ella habían salido en algunas ocasiones, nada serio, solo unas citas cerca del consultorio o al cine. Nayeon no se sentía particularmente atraída hacia la chica, mas bien era Yeri quien la había convencido de salir con ella, y al cabo de un mes de intentar llegar a ser algo llegase dio por vencida al ver que Nayeon tenía novia, además de que era algo “coqueta”.

-Ya puedes pasar. – Yeri llamaba a Nayeon desde detrás del cubículo.

-Gracias, Yeri. Te ves linda hoy. – Nayeon le guiñaba el ojo a la sonrojada recepcionista.

El doctor recibió a Nayeon con una semblante bastante serio. Nayeon sabía que algo andaba mal, el era una persona bastante hiperactiva y siempre recibía, atendía y despedía a sus pacientes con una gran sonrisa.

-Por favor, doctor Kim, hable de una vez. – Nayeon comenzaba la plática con alfo de nerviosismo en su tono.

-Nayeon, necesito que respires lenta y calmadamente, la noticia que te daré es bastante grave.

-Dígamela de una vez.

-Está bien… Nayeon, te mandé a llamar tan pronto como pude, después de que encontrara algo que me sorprendió bastante en tus estudios. Nayeon, lamento informarte que… tienes cáncer.

-¿C-cáncer?

-Para ser mas exacto, cáncer en el pulmón izquierdo.

-Y-yo…

S U B W A Y [Twice]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora