Siempre a tu lado (Supercorp)

1.

Un nuevo día, un nuevo puesto de trabajo, se sentía casi como una nueva vida. Si, desde el día que la dejé siento que esta no es mi vida, que estoy en alguna especie de sueño o pesadilla, pensándolo bien. Pero esa es una historia que les contaré luego. Este es el inicio.

Me dirigía a CatCo como todos los días luego de una ronda en la ciudad y asegurarme que todo estuviese en orden, era una mañana muy tranquila para mi sorpresa.

Saliendo del ascensor me encontré con el caos y casi hubiese deseado llegar tarde o no venir del todo. La señorita Grant daba órdenes y gritaba a más no poder, me compadezco de la pobre Eve, al parecer una importante empresaria daría una rueda de prensa acerca de unos avances tecnológicos y ella quería la exclusiva antes de ese día. Los reporteros salían y entraban de su oficina, algunos con un rostro de querer maldecir y pegarle a algo.

Me acerque a Eve para preguntarle un poco más de la situación porque al parecer llegue demasiado tarde a la reunión que no tenía idea que tendríamos.
-Eve, cariño mío- le decía en un tono más que cariñoso, necesitaba que me dijera que había pasado en esa reunión- ¿qué ha pasado en la reunión? Me dirás, ¿verdad mi vida?- si amigos, Eve gusta de mí y me aprovechaba de eso pocas veces o las más necesarias, eso no me hace mala persona o sí?
-Danvers, Danvers… rogando por mi ayuda, quién lo diría? – se iba a aprovechar, ya lo veía venir – Deberías de dejar las citas de piernas extremadamente largas para los fines de semanas o al menos para más temprano y así te dejan venir a trabajar – soltó una risita. Se burlaba de mí pero no me podía enojar, necesitaba la información.
-Eve por favor, sabes que si entro a esa oficina y le pregunto directamente a Cat me arriesgo a que me tire una silla – no bromeaba, cuando se trata de exclusivas Cat se pone loca y hasta da un poquito de miedo.

De pronto escucho que gritan mi nombre, provenía de la oficina de Cat. Me voltee hacia Eve quien me miraba con una sonrisita de “estas frita, Danvers”. Me dirigí rápidamente a la oficina esperando no ser embestida por una silla, una tasa o hasta el propio escritorio; me vería en la penosa necesidad de explicar a media oficina como cualquier cosa que me tire Cat termina en el piso destrozado y yo como si nada hubiese pasado.
--S-si, señorita Grant? – me estaba atragantando con las palabras de lo nerviosa que estaba.
--Kara Danvers, respóndeme algo – ya está, me quede sin trabajo – aprecias tu empleo? Aprecias ser parte de una de las mejores revistas de National City y ser la periodista estrella de las Reina de todos los medios? No creas que no note tu ausencia en la reunión, me di cuenta cuando nadie me estaba retando como lo sueles hacerlo tú – tenía los ojos como platos.
-Señorita Grant – trague saliva – tuve unos pequeños inconvenientes y no estaba enterada de la reunión con el staff de periodismo. Mis más sinceras disculpas, le aseguro no pasara otra vez – pasa siempre, aun no tengo idea como Cat sigue aguantando mis tardanzas, el que me vaya a mitad de la tarde por culpa de un robo o un tonto alienígena en el parque. Supongo que algún día le preguntare pero hoy no, ya tenía suficientes problemas.
-Como sea, Kara, no me interesa – tomo asiento y me extendió un sobre
-Esto qué es? – mire el sobre y aprecie unas páginas y ¿fotos?
-Eso es todo lo que necesitas saber de L-Corp y el nuevo artefacto que están desarrollando desde hace unos meses – Ja! Ya sé de quién estamos hablando y créanme no estoy muy feliz.
-¿Qué necesita que haga con esto, jefa? – no estaba segura de esta asignación – quiero decir, Cat, tú sabes lo que significa ese apellido para mi…
-Mientras estés vestida de Kara Danvers, mi empleada, harás lo que yo diga así que lee detenidamente esos documentos, nada puede salir mal en esta entrevista – esbozo una pequeña sonrisa – puedes ser muy segura y autoritaria como Supergirl pero cariño, como Kara eres muy torpe – no lo podía negar, siempre me he sentido más fuerte y confiada con mi alter ego. Y si, Cat sabe de mi identidad casi desde el día cero pero teníamos un trato: yo conservaba mi empleo siempre y cuando no interfiera con mis hazañas salvando y protegiendo a la ciudad, hasta ahora iba muy bien.
Por supuesto cualquier exclusiva que tenga es y siempre será para CatCo Magazine. No me molesta, de hecho, no confiaba en nadie más que ella y obviamente mi hermana, Alex.
-Como mandes, Cat – solté un bufido y empecé a leer – al menos me podrías decir qué súper invento está haciendo Luthor ahora?
-Un transportador de materia – eso suena ostentoso – y supone se ocupara para tele transportar víveres a los más necesitados en África y todo el mundo – eso si es nuevo, Luthor ayudando a la gente, quien lo diría.
-No me digas! Eso sí que es… raro…
-Una cosa más Kara – se me quedo viendo fijamente –. Esa entrevista me tomo meses de conseguir así que te pido, de la manera más atenta, deja tus sentimientos de un lado por esta vez. Si algo sale mal, encontraré la manera de destruirte así seas de acero – me sonrió – además, la entrevista no es con quien crees – levantó una ceja y me hizo de seña para que saliera de ahí.
Le sonreí ampliamente intentando que pareciera sincero y salí de esa oficina dirigiéndome a mi escritorio.

Empecé a leer el documento y… esperen, qué? ¿Qué pasó aquí? ¿Por qué dice que la CEO se llama Samantha Arias? Hubiese jurado que entrevistaría a la menor de los Luthor y no a esa total desconocida para mí. ¿Qué pasó con la pequeña Luthor? ¿Dónde estaba Lena?

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Espero les guste!❤