Siempre a tu lado (Supercorp)

10.

POV Alex

Me ofrecí como voluntaria para recoger el artefacto que nos proveería L-Corp, cortesía de Lena Luthor. Debo decir que me asombra que haya accedido a la primera sin hacer preguntas, tal vez se deba a que quiera llevar la fiesta en paz con los supers después de la situación con su hermano.

Llegue alrededor de 30 minutos antes del mediodía, me identifique con los guardas de seguridad de la planta baja y me indicaron el único ascensor con acceso al piso más alto del edificio.

Entre en el piso y la primera en recibirme es una morena de estura baja, con unos lentes ligeramente grandes. Le anuncie mi nombre y me indico un sillón para esperar. Luego de lo que creo fueron 5 minutos me indicó que la señorita Arias me atendería.

-La puerta marrón es la oficina, no es necesario que toque -hice un movimiento de cabeza en señal de agradecimiento y me encamine a la puerta marrón.

-Señorita Arias, mi nombre es Alexandra Danvers -entre y cerré la puerta a mi espalda y me coloque frente al escritorio, la mujer veía al ventanal -de antemano le agradezco que hayan fabricado lo pedido con tan poco tiempo, créame que es muy importante.

-Así que trabajas con Supergirl -la silla se volteó y vaya sorpresa la que me llevé -que pequeño es el mundo, Alex.

-¿Luthor? ¿Qué haces aquí? -es su empresa, que tonta soy -quiero decir la señorita super... quiero decir -trague grueso -Supergirl no me dijo que tu entregarías la pieza...

-Ya ves, me gusta darme una vuelta por mi empresa de vez en cuando y pues, yo misma supervisé la fabricación de la pieza -su sonrisa de yo lo puedo todo no pudo ser más intimidante. Me hizo de seña para que me sentara y ella hizo lo mismo -pero cuéntame, ¿Colaboras con Supergirl? ¿Desde hace cuánto? -pensé bien mi respuesta pues no podía poner en evidencia a la DEO.

-No mucho -toda la vida, desde que llego a este planeta - ¿recuerdas que te dije que soy un agente federal? -asintió lentamente con la cabeza -pues no hace mucho la señorita me recluto a su equipo... ya sabes, con mi conocimiento la puedo poner alerta y trabajar en casos juntas -¡Ja! La mentira y yo somos mejores amigas.

-Que afortunada -parecía que debatía en su interior seguir hablando hasta que por fin lo hizo -así qué, ¿La conoces bien?

-Mmmm, se podría decir que si... hemos compartido mucho -más de lo que deberíamos, sé cosas que ninguna hermana mayor quiere saber de su pequeña y dulce hermanita.

Una vez encontré a Kara entre las piernas de una modelo muy conocida... créanme que es algo que NADIE debería ver, es una imagen que me perseguirá toda la vida. Lo peor de todo es que me echó de su casa porque y cito "Se me cayó una moneda y quedó justo en medio de las piernas de mi acompañante, solo la necesito encontrar" y me dejo afuera la muy Kriptoniana. ¡Dios, perdónala! Ella no sabía lo que hacía.

Como sea, volvamos a Lena.

-Y Kara... ¿también la conoce? -creo que noto la confusión en mi rostro porque se apresuró a continuar -quiero decir, sé que ellas trabajan juntas en un par de reportajes de vez en cuando...

-No te sigo, Lena. Lo que me preguntas es si ellas son ¿amigas? -puedo divisar la verdadera pregunta a kilómetros y créanme cuando les digo que mi vida amorosa no es la mejor pero la de Kara ¡JA, JA, JA! No puede ser, Lena la cela con ella misma, esta para hacerlo un libro.

-Sí, supongo que eso estoy intentando... -rascó su cuello y su rostro no podría estar más rojo.

Sé que hago mal, sé que no debería pero Lena tiene que avisparse con Kara, invitándola a comer y ofreciéndole un aventón a casa no hará progresos. Lo que Lena necesita es algo de competencia sana, un reto que la haga dar lo mejor de ella en su proceso de reconquista y Kara me lo agradecerá. Ya lo verán.