«Archivo Gold - Código 101»
Un año ha pasado desde que los 11 agentes completaron la misión #101.
La nación fue la encargada de seleccionar a los 11 hombres más capacitados para infiltrarse dentro de la mansión Mnet: lugar donde se encontraba el pr...
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🔎 INTERROGATORIO ─ AGENTE #002: PARK JIHOON 🔎
Seúl, Corea del Sur. 25 Mayo 2018. 23:20 PM
Cuando Kuanlin salió de la sala sin su abrigo y con una sonrisa triste, Jihoon supo que el menor necesitaba más contención que nunca. Él mismo sabía que abandonar la organización que le había dado todo, era algo difícil de hacer. Lo había vivido en carne propia después de todo.
─ Estarás bien Kuanlin-ah ─ Afirmó Jihoon, cuando el menor llegó y se sentó a su lado.
Quería darle su espacio, ya que era consciente de que se necesitaba tiempo para volver a levantarse sin ningún respaldo, pero esperaba que el menor supiera que siempre estaría ahí para él.
─ Lo sé, voy a estar bien. ─ Respondió Kuanlin luego de unos segundos, dándole una sonrisa de medio lado.
No lo pensaba a menudo, pero incluso si era el más pequeño de todos y un extranjero, la calidez de los demás chicos era real en cada misión e incluso fuera del trabajo. Podía confiar en ellos, y odiaba tener que mentirles cuando estaba de doble agente.
─ Probablemente sea mi turno ahora. ─ Declaró Jihoon, distrayendo los pensamientos del menor.
─ Espero que no sean demasiado crueles contigo.─ Deseó Kuanlin, viendo como la puerta de la sala volvía a abrirse y el guardia caminaba hacia ellos.
─ Yo también puedo ser cruel. ─ Le sonrió Jihoon, desordenándole el cabello de forma juguetona para quitarle los malos pensamientos. ─ No te preocupes por mí.
─ Park Jihoon, tu turno. ─ El mayor fue llamado tal y como ambos esperaban, pero en vez de ser agresivo el guardia sonaba completamente agotado.
Jihoon no quería saber cuál de los interrogados era el responsable de que el hombre luciera devastado, todos estaban un poco locos a su manera y algunos podían ser demasiado despiadados.
El guardia lo arrastró ejerciendo poco y nada de presión en su brazo, y cuando entraron a la sala, fue el primero en sentarse en la silla frente a la puerta. Jihoon podía decir fácilmente que el hombre no se sentía del todo bien. ¿Acaso la organización no tenía más guardias?
─ ¿Te sientes bien? ─ Jihoon consultó preocupado, al notar su facie febril. El guardia levantó la cabeza al escucharlo y por primera vez notó lo angelical que el agente lucía.
Quiso contestar, porque Jihoon era la primera persona que era amable con él desde que lo habían golpeado, sin embargo el interrogador de la nación los interrumpió.
─ Jihoon, mueve tu trasero a la silla de una vez. ─ ordenó, sin dirigirle ni una mirada. Todo lo que involucraba a ese agente le molestaba, incluso el rostro que se cargaba.
─ No tiene por qué ser tan hostil, estoy aquí para cooperar después de todo. ─ Respondió con una pequeña sonrisa.
Lamentaba no poder seguir su conversación con el guardia, así que le deseo lo mejor en un susurro y se fue a sentar frente al interrogador.
