2 Preparando el viaje

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Traducción (aproximada) de la imagen:

(Se lee de derecha a izquierda)

1ª viñeta.

Yukino: Pero, Sting-sama... ¿Usted se siente bien? Suele estar mal en los transportes.

2ª viñeta.

Sting: Sí, gracias a esto.

Yukino: ¡¿Mis Float Cookies?!

3ª viñeta.

Sting: En verdad, yo las guardé en mi bolsillo para poder jugar con ellas un poco en mi casa. ¡Esto ha sido lo que nos ha salvado!

Lector: Yukinooooo.

4ª viñeta.

Minerva: Te ves realmente arruinada.

Rogue: He recuperado tus llaves.

Sting: ¡Ah!

5ª viñeta.

Sting: ¡Lo siento, Yukino! ¡Las llaves las tenía él!

Orga: ¿¡Eh!?

Yukino: Eh, ¡está bien! ¡Todo va bien ahora!

6ª viñeta.

Yukino: Gracias infinitas, amigos.

----Página de Fairy Tail Gaiden: Los Dragones Gemelos de Sabertooth----

A los Dragon Slayers no nos gustan los vehículos porque nos provocan mareos, pero yo siempre les sugiero que vayamos en ellos debido a que es una forma rápida de viajar. Había veces en las que el resto me llamaba masoquista, ¿y qué queréis que os diga? Era totalmente cierto.

Ese verano en concreto, yo había insistido en que nos fuéramos todos de vacaciones a una isla cerca de Magnolia. Al principio no aceptaron, alegando que no merecía la pena el tiempo de viaje para lo poco que íbamos a encontrar en la isla. Pero nadie puede resistirse a mi insistencia, por lo que ellos terminaron aceptando, aunque seguían con algo de desgana.

-¿Y si vamos nadando?- propuso Natsu-san, ya en el puerto. El que tuviera su maleta indicaba que estaba listo para irse de vacaciones, aunque, por supuesto, eso no incluía el viaje en barco.

-Natsu-san...- lo llamé yo.- Nada va a evitar que vayamos en barco.

-¿Es demasiado tarde para exponer mi teoría de que los transportes son demonios del libro de Zeref que solamente nos afectan a nosotros?- preguntó Natsu-san.- Eso significa que deberíamos alejarnos de ellas. Transporte = Malo.

-Oh, vamos, Natsu, sé un hombre y súbete al transporte sin rechistar- comentó Laxus-san con los brazos cruzados.

Las risas empezaron a hacerse presentes de parte de Natsu-san y Gajeel-san. Se notaba que los hermanos Strauss estaban empezando a pasar más tiempo con los Raijinshuu...

-¿Qué?- preguntó algo molesto Laxus-san al no poder averiguar el motivo de sus risas.

Yo le tiré de la manga de su abrigo para llamar su atención. El acto funcionó al instante, ya que Laxus-san ya tenía la vista fija en mí.

-¿Tú sabes por qué se ríen?- me preguntó.

Yo asentí, y le hice un gesto indicándole que acercara su cabeza a la mía. Este se puso de cuclillas, quedando más o menos a mi misma altura.

Cuentos de una pequeña Dragon SlayerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora