Cuando íbamos en camino hacia la sala, en mi cabeza estaba pensando si fue realmente correcto que le haya dicho a Mariana que me pusiera lejos de Eduardo.
-¡Estoy emocionada! -dijo Mariana entusiasmada- volveremos a ver otra película de terror.
Cuando Mariana dijo esas palabras me acordé de que, antes ya habíamos visto una película de terror y recordé la parte donde un fantasma salía y Eduardo brincó del susto, recuerdo que se aferró a mi brazo porque estaba muriendose del miedo. Volví a sentirme un poco mal porque nos habíamos dejado de hablar, pero ahora estábamos con nuestros amigos y no tenían que tener la culpa ellos de los problemas que tuvimos.
-¡Si, también estoy emocionado! -dijo Sergio con una sonrisa en el rostro- espero y sea mejor que la película que habíamos visto antes.
-Si.. no daba tanto miedo -dijo Eduardo muy confiado-
-Miren quién habla -respondió Mariana a Eduardo riéndose de lo que había dicho- ¡Jajaja! Si te recuerdo, saltaste mucho del susto, incluso estabas casi abrazando a Diego.
-¿Podemos olvidarlo por favor? -dijo Eduardo mientras se ponía serio-
-¡P-perdón! -respondió Mariana- No es mi culpa que te te agraden mucho las películas de terror. Aprendan de Sergio, el se emociona al ver una.
-Je -dijo Sergio haciendo una pequeña sonrisa- Supongo que sí..
Cuando entramos a la sala, nos sentamos como nos había dicho Mariana, yo pasé primero para ocupar el haciendo del fondo, luego siguió Sergio, enseguida Mariana y al último Eduardo.
-¡Oigan! -nos grito Sergio- ¡Nos faltaron las palomitas!
-No hay problema -dijo Mariana mientras sacaba dinero de su billetera- Ve con Diego por unas palomitas a la dulceria, todavía faltan unos ocho minutos para que empiece la película.
-Está bien, vamos Diego.. -me dijo Sergio un poco nervioso-
-Vamos -respondí mientras me levantaba de mi asiento-
Sergio y yo fuimos hacia la dulcería para comprar unas palomitas.
Antes de llegar a la fila di una vuelta rápido para decirle a Sergio que qué palmitas íbamos a comprar, pero el tropezó conmigo y caímos ambos al suelo.
Sergio quedó encima de mi, pero alcanzó a poner los brazos y quedamos de frente, yo estaba muy avergonzado porque estábamos en público, (realmente no habían muchas personas presentes) pude ver como las mejillas de Sergio se empezaban a tornar rojizas. Creo que ambos podíamos sentir nuestra respiración en el cuello.-¡D-diego p-perdón! -me dijo sonrojado mientras se levantaba-
-Sergio.. perdón -dije avergonzado- fue mi culpa por dar la vuelta tan así de repente.
-V-vale, no te preocupes -respondió mientras alzaba la mano para que me pudiera levantar-
Estiré la mano y Sergio me ayudo a levantarme, yo igual me había sonrojado porque soy un poco sensible a que hagan esas cosas.
-Oye, en serio perdón -le dije a Sergio un poco apenado-
-No te preocupes -respondió Sergio mientras dibujaba una sonrisa y aún tenía sus mejillas rojas como un tomate- fue solo un accidente.
-¿Entonces que palomitas compraremos? -pregunté a Sergio-
-Yo digo que deberíamos comprar las más grandes, yo como muchas palomitas cuando estoy viendo una película.
-Está bien, entonces compremos las más grandes
-Si, las más grandes 7w7
-¡Sergio! -le grité al ver su rostro- ¿Por qué hacen ese gesto? no lo entiendo.
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A Tu Lado (Yaoi Furry)
SonstigesBueno amigos, está es mi primera historia (que emoción <3) La historia trata de un lobo llamado Diego, (es el chico de la foto de mi perfil) quién recién a entrado a la preparatoria y no sabe lo que le espera. En la preparatoria a donde el asistirá...