¡¡Amo a los chicos Coreanos!!

*Imagina (Hyunsik)*

Idol: Hyunsik  

Me había mudado, y si, estaba muy feliz de haberlo hecho ya que venía meses ahorrando para esto, y si, me había mudado sola. Aunque digamos que sola, sola nunca voy a estar, formo parte de un grupo de amigos algo bastante grande, uno que Hyunsik y yo habíamos formado en los primeros años de secundaria y que paso a paso iba creciendo, soy bastante independiente ya de nacimiento, por lo cual la idea de vivir sola siempre estuvo y no tiene nada que ver con mi crianza, la cual fue estupenda lo admito, pero ya tengo veinticinco, y mi familia es muy de decir, "Vas a mudarte cuando ya tengas a tu pareja" , Y como aún no llegó ese chico especial, bueno, con un trabajo estable como lo es ser secretaria de abogados mientras soy estudiante, mi sueldo es lo suficiente como para poder soportar alquilar un departamento por mis propios medios, y si, soy la primera y única hasta ahora que se independiza, por lo cual, se que voy a estar llena de compañía todos los días, y algunas noches también.

Hyunsik, mi mejor amigo, y Changsub son los que me están ayudando en la traslación de mis muebles a mi nueva casa, JB, si me había olvidado del hermano menor de Hyunsik, era quien manejaba la camioneta de su padre mientras los otros dos se encargan de bajar las cosas... Ya se, es muy lunes para esto, pero es mi único día libre, a parte de domingo, pero ayer estaba lloviendo para hacer la mudanza, así que mejor dejarlo para hoy.

Bajé de la parte trasera con la caja que decía "Cosas de vidrio" y me acerqué a la puerta verde de mi nueva casa.

Las calles estaban medio resbaladizas por la tormenta de ayer y toda la humedad que estaba haciendo, pero eso no impedía que mi entusiasmo sea realmente notorio. Abrí la puerta haciendo ese típico sonido de chirrido y quedé embobada, si bien obviamente ya había visto el departamento, no podía deja de emocionarme la idea de poner todos los muebles ya de una vez. Dejé la primera caja en la entrada mientras mis amigos bajaban el sillón rojo con el nailon encima. Me adentré para correr las cortinas verdes que el departamento ya tenía, y dejé que la claridad de la mañana entre a mi nuevo hogar.

Suspiré. -Que hermosa vas a quedar. -Dije. Estaba la posibilidad de comprarla, pues, anteriormente pertenecía a un hombre que se la dejó a sus abuelos, y estos al conocerme me dieron la oportunidad de alquilarla a bajo costo con la posibilidad de comprarla en un futuro, ya que tiene un piso más y podría vivir tranquilamente ahí si en algún futuro se me daba la idea de formar una familia.

Volví a la calle con aires de felicidad, pero vi que parte baja del sillón no estaba cubierto y comenzaba a mojarse, Hyunsik y Changsub estaban dentro del camión, supongo que por bajar alguno de los muebles grandes que quedaban, así que sin más corrí hacia el sillón desesperaba por que no se moje más de lo que ya estaba, que no vi a quien justo pasaba delante de mí y lo choqué casi brutalmente.

-Lo siento, lo siento. -Me disculpé tomando el brazo del hombre, quien no calló por tener buena estabilidad. Era un tipo grande, y por su cara puedo ver que lo hice enojar bastante.

-¿Lo sientes? -Gritó sobresaltándome. -Suéltame. -Tiró de su brazo y quedé estática, comenzó a decirme algún que otro insulto velozmente mientras mantenía su mirada fija en mí y yo me sentía cada vez más pequeña.

-Lo siento, de verdad... -Murmuré, suelo ser demasiado sensible y es por eso que mis amigos suelen tener ese instinto protector conmigo.

-Ya deja de repetir eso, pareces un maldito loro. -El tipo se acercó peligrosamente a mí, y yo sin entender el porque de su fuerte reacción, fui dando pasos hacia atrás. Ya se que es Lunes por la mañana, y que a nadie le gusta que lo choquen fuertemente, aunque sea sin querer, pero la reacción que tuvo el hombre no coincide con lo que estaba pasando. -Ya borrate de mi vista antes de que...

-¿Que pasa aquí? -Habló Hyunsik y lo miré al tiempo que bajaba de un salto sonoro del vehículo realmente serio y a pasos extremadamente firmes se acercó a nosotros, Changsub también había bajado, solo que con más delicadeza sentándose primero y después empujarse hacia adelante. Hyunsik se puso delante de mí con sus hombros erguidos provocando cierto miedo al tipo, ya que retrocedió unos pasos.

-Ya veo, No puedes hacerte cargo de tus acciones y necesitas de estos guardaespaldas truchos ¿Eh? -Miró a Hyunsik y después a Changsub quien se puso a su lado con expresión neutra.

-Discúlpate con ella. -Gruñó Hyunsik con sus cabellos grises cayendo sobre su frente.

-¿Disculparme por qué? -Preguntó incrédulo el tipo casi sonriendo.

-La cuadra entera se enteró del escándalo que hiciste por un empujón. -Le contestó el pelinegro algo más tranquilo que el grandote que estaba frente a mí protectoramente.

-¿Un empujón? La tipa casi me hace besar el piso. -Gritó apuntándome con una reacción exagerada.

-¡Ya cállate y discúlpate con ella! -Gritó más enfurecido Hyunsik, que me dio miedo y lo tomé del brazo con ambas manos tirándolo hacia atrás con delicadeza.

-No importa, ya terminemos de bajar las cosas Sik, ya pasó... -Le dije con algo de desesperación pensando en lo mal que se va a poner la cosa si sigue así.

-¿Hyun que pasa? -JB apareció de la nada mirándonos.

-Nada Jaebum, vuelve a la camioneta. -Le contestó.

-Más vale que no vuelvas a cruzarte en mi camino, mocosa... -Me apuntó amenazadoramente,      -Porque... -Hyunsik se le puso demasiado cerca casi sonriendo de la impotencia.

-Le tocas un pelo y eres hombre muerto. -Sentencio... Luego de esto no hubo más palabra entre ellos, ya que el tipo prácticamente corrió lejos.

-Hey... -Lo giré tirándolo del hombro hacia atrás, aún estaba tenso mirando al tipo alejarse. -No debiste actuar tan así. -Murmuré para después rodearlo con mis brazos y enterrar mi rostro en su pecho. -Gracias... -Él a no muy a menudo podía perder los estribos, era muy paciente y tranquilo, pero si se enojaba más de la cuenta, solía volverse loco, en muy escasas ocasiones lo hizo, y en casi todas yo estuve presente.

-Tranquila... No va a volverse a acercar si sabe lo que le conviene. -Murmuró en mi cabeza, apretándome más contra él.

Más tarde me enteré que aquel tipo solía tener esos enfrentamientos muy seguido con vecinos del barrio por su fuerte temperamento y mucha falta de respeto.