10 canciones para Castiel. - Destiel

1. Rainbow In The Dark.

Aclaración: El texto entre asteriscos es un Flashback.

Castiel sintió un hormigueo recorrer sus brazos y su espalda al escuchar las primeras letras de la canción. Conocía esa melodía, muchas veces había escuchado a Dean tararearla o cantarla sin que el rubio se diera cuenta y siempre le hacía sentir algo especial, una gran paz y un sosiego que le hacía tranquilizar. Algo que él consideraba muy lindo. No sabía qué era con exactitud, pero le agradaba escuchar esos sonidos melodiosos salir de los labios del mayor de los Winchester.

Tuvo que sacudir un poco su cabeza para deshacer esos pensamientos de su mente para así prestar atención a lo que la letra decía, pues no quería perder el hilo de la 'misión' —porque él lo consideraba una misión muy importante—, que Dean le había dado al regalarle ese casete, así que decidió volver a prestar atención al sonido que inundaba sus tímpanos.

Leyó nuevamente el post-it de color amarillo que el rubio le había dejado sobre la puerta, pasando sus dedos por el papel con suavidad cómo si quisiera sentir la textura de la alborotada caligrafía del propietario en aquella nota; divagando entre sus pensamientos, mientras intentaba relacionar el concepto de 'salvación' con el ritmo o la misma letra de la canción, múltiples recuerdos se agolpaban en su cabeza, algunos de días atrás y otros de muchos años anteriores que le hacían estremecer. No porque fueran horribles —aunque muchos de ellos sí lo eran—, sino que todos se relacionaban con la misma situación. Él siendo salvado o él salvando a los demás.

Apocalipsis, el purgatorio, la caída de los ángeles, las cacerías junto a los hermanos, los leviatanes apoderándose de él y un sinfín de situaciones más en donde ha tenido que luchar, ser fuerte y valiente para destrozar cada obstáculo que se le atravesaba. No sólo para salvarse él, sino para salvar a las personas que él consideraba muy importantes también.

Él sabía, realmente sabía que nada había sido fácil.

Ninguna de las guerras que ha tenido que combatir habían sido sencillas y siempre tuvo decisiones que tomar a último minuto. Revelarse ante sus ideologías, los ángeles, el cielo, incluso ante Dios, quién le había otorgado la misión más importante.

Por todos y contra todos, luchó por seguir su instinto de hacer siempre lo correcto y, sí, falló muchas veces, pero también venció muchas otras, saliendo victorioso con la ayuda de sus amigos, de su familia.

Sintió múltiples emociones mezclarse en su interior ante tales recuerdos que en su cabeza pasaban como si de un vídeo se tratara, reproduciéndose una y otra vez, una tras otra, pero hubo un momento en el que sólo pudo seguir concentrado en un acontecimiento en especial. Su cuerpo se estremeció.

***

El ángel descendió del cielo apenas el ser divino se lo ordenó, ignorando cada reclamo y reproche que sus hermanos le daban a su padre ante tal disparatada misión que se le había otorgado, siendo el más pequeño de todos.

Castiel, quién siempre había sido un ángel discreto, había sido asignado para realizar su más grande acto de valentía para probarle al cielo que podía ser mucho más que un simple observador de la vida terrestre. Y él, como buen servidor, no se había negado a cargar en la espalda la gran responsabilidad de rescatar al recipiente de su hermano mayor de las profundidades del infierno.

Llamas, armas de tortura y grietas por todas las paredes, además de gritos desgarradores de almas en pena que componían el lugar, se adentró con un solo objetivo en mente: hallar al humano en peligro. Ignoró cada petición, luchó contra todo ser que se quiso interponer en su camino, recibiendo golpes y rasguños, cortes de profundidad y quizá qué cosas más que no tuvo tiempo en diferenciar, sólo continuaba con su mente centrada en cumplir con lo que se le había pedido desde arriba.