Sorpresa.

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 Anna.

Tras unas casi tres semanas los gemelos vuelven hoy de Miami. Vendran sobre las cinco de la tarde y tengo muchas ganas de ver a Jesús. También a Dani, pero me apuesto lo que queraís que Nay tiene mas ganas de verle que yo. Me contó que Dani le había dicho de una vez lo que sentía, y bua... me quedé en shock la verdad. Pensaba que quien daría el primer paso sería ella, o ambos a la vez. Yo he sido incapaz de contarle a nadie que Jesús y yo... casi nos comemos la boca. No me avergüenzo ni mucho menos, solo es que... no sé, me como mucho la cabeza con estas cosas la verdad y es que sea del todo bueno. Si me empiezo a comer la cabeza significa que ya siento por él más de lo que debería y no quiero enamorarme, me niego. Bebo mi fanta de limón mientras veo a mi mejor amiga mirar su móvil tranquilamente.

- ¿A que hora llegaban los repetidos? -le pregunto y me mira con una sonrisa-

- ¿Ganas de verles? -dice alzando una de sus cejas- bueno de ver a Jesús... -dice poniendo cara de pillina-

- Podría decir lo mismo de ti con Dani ¿o no quieres comerle la boca nada más verlo con lo que te dijo? -le pregunto y ella se ríe- Ves no me lo niegas.

- Vete a la mierda -dice y me río-

- Hablando de besos... ¿te acuerdas de cuando Dani entró a la habitación mientras ayudaba a Jesús a terminar su maleta? -le digo y escupe la coca cola de vuelta a su vaso mientras bebía-

- ¿¡Os besasteís!? -dice en un grito que se escucha en toda mi casa-

- No, pero casi... llevo su tiempo comiendome el coco de qué habría pasado si no hubiera entrado Dani en ese momento.

- ¿Que os habriaís comido toda la boca? -me pregunta- o tal vez terminariaís haciendo algo más -dice levantando las dos cejas-

- Eres tontisíma -le digo poniendo los ojos en blanco-

- ¿Me estas negando que Jesús Oviedo te pone? -dice flipando-

- No lo niego pero tampoco lo confirmo -digo haciendome la interesante-

 Comenzamos a reirnos y nos miramos al escuchar que tocan el timbre. Miro la hora y veo que son las tres y media de la tarde. Los chicos aún no han llegado asi que podemos estar tranquilas...

- Ve a abrir -le digo y yo me tiro al sofá-

Escucho un grito descomunal desde la puerta de mi casa por parte de mi mejor amiga, asi que a saber quien coño es.

- ¿Quien es Nayi? -le pregunto y veo a Jesús Oviedo entrando por la puerta de mi casa- hostias...

- Sorpresa - dice y me sonríe- por cierto, bonito pijama.

Y así es la vida de Annabel señoras y señores, sí, un fail continuo.







Dani.

Sonrío al ver como Nay se pica con Anna mientras van sentadas en los asientos delanteros del coche de la morena. Si ya son las doce de la noche y hemos querido, bueno.. las chicas practicamente nos han obligado a venir de fiesta con ellas al teatro Barceló. Anna aparca, entramos a la discoteca al reservado que nos tienen siempre allí, y comenzamos a beber. Tras ya pasado un rato, miro a Nay, la cual esta algo borrachilla ya, y ella solo me suelta un suspiro, estamos sentados al lado y no hemos hablado practicamente nada.

- ¿Pasa algo? -le pregunto y niega- ¿estas segura?

- Nada Dani nada, tenemos mucho de que hablar pero nada más.

¿Destino o casualidad? {Gemeliers}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora