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Ambos jóvenes -Jimin y Yoongi- se encontraban en la casa del peligris viendo televisión en un sábado aburrido, típico sin nada que hacer más que estar con tu pareja, en el caso de que tengas. Yoongi tenía a su pollito acurrucado entre sus fuertes brazos mientras el pelinegro se aferraba al cuerpo del mayor, algo totalmente lindo y romántico.

El menor se estaba aburriendo puesto que no es fan de la televisión, él prefiere leer un libro, pasarse el día en sus redes sociales o viendo actualizaciones de sus ídolos favoritos, osea ¿Quién no pasaría un fin de semana como Jimin?

—Me aburro amor —Suelta el pelinegro junto con un gran suspiro, su Hyung lo mira tiernamente y le sonríe.

—¿Qué quieres hacer, pollito? —Pregunta sin más dándole posibilidades de hacer cualquier cosa que al menor se le plazca.

Y ese fue el problema, Jimin no tenía idea de que podía hacer, si salir si quedarse en casa, ver televisión o leer, no sabía, su mente estaba en blanco. Se quedó pensando un momento, hasta que su teléfono sonó, era el doctor Choi, quien estaba a cargo de su enfermedad secreta.

El menor se levantó rápido de la cama y fue corriendo con sus cortas piernas hasta el baño, acción que le resultó adorable a su Hyung. Una vez se encontraba en el baño, tomó la llamada rápidamente.

Choi: Entonces Jimin ¿Ya sabes quien te ayudará en tus tratamientos? Debemos comenzar lo antes posible, el virus está bastante avanzado y solo lo retrasas más.

Jimin: Estoy en eso doctor, no tengo quién me ayude aún.

Choi: ¿Y su novio?

Jimin: Él no sabe de esto y no quiero preocuparlo así que no sabrá.

Choi: Ya te he dicho que no le puedes esconder algo así, creerá que no le tienes confianza.

Jimin: No se enterará, tengo todo bajo control.

—No se enterará ¿De qué y quién? —

El pelinegro al oír esas palabras salir de la boca de su novio cortó rápido la llamada y salió del baño, se encontró con su pareja mirándolo fijo, confundido y dudoso, sus oscuros ojos ponían nervioso a Jimin, le quitaba hasta las palabras.

—Repito, no se enterará ¿De qué y quién? —

Mierda, Jimin debía hacer algo pronto ¿Qué tal si Yoongi oyó toda la conversación? Se preocuparía por él y era lo que menos quería, para muchos puede ser estúpido que una persona esconda semejante cosa para no preocupar a su amor, pero así era Jimin, así era él.

—Contesta Jimin —

El menor sabía que si no hablaba su novio se molestaría, paso saliva en seco y lo vio a los ojos, instantáneamente se acobardó, él quedó con sus labios levemente abiertos apunto de soltar una palabra, pero no lo hizo, no le iba a decir eso, no para preocuparlo.

—Jimin —Bufó molesto el mayor, Jimin debía hablar antes de empeorar las cosas —Veo que no oíste, lo repito no se enterará ¿De qué y quién? —Remarcó este sus palabras junto con su gruesa voz la misma que le transmitía leves nervios a Park.

—Tsk, este... Hablaba con mi... Prima... Sobre la... Sorpresa que le está organizando a su —El mayor suspiró serio, él conocía demasiado bien a su pollito, sabía cuando le escondía algo y está era una de esas ocasiones.

—Vamos pollito, dime la verdad —

Jimin suspiró y le sonrió a su mayor —Simplemente no era nada amor, lo juro —Está vez lo dijo en un tono más seguro actuado claro el mismo que le entregó confianza al mayor y este le creyó.

—Bien pollito, vamos a la cama bebé —

Ambos se fueron a recostar, apagaron la televisión y quedaron con la poca luz del exterior, puesto que ya estaba oscureciendo en cuestión de segundos la noche atraparía la habitación y toda la cuidad junta.

Yoongi estaba comiendo a besos a su lindo pollito, amaba hacerle mimos y llenarlo de amor, igual que la promesa que se hizo hace dos años, casi tres pues ambos están a tan solo cuatro meses de cumplir otro año más de relación, fantástico ¿No?

—Amor —Hablo el menor ya convertido en un tomatito por los mimos de Yoongi, él lo vio para que continúe —¿Qué harías si te estuvieran escondiendo algo como, no sé, una... Enfermedad?

El mayor lo miró confundido ¿A qué se debía esa pregunta? ¿Su pollito de arroz estaba bien? —Me molestaría pero creo que tal vez entendería por lo que esa persona está pasando ¿Por qué preguntas pollito? —

—Por nada, ahora llename de tus besos que tanto me gustan —

Jimin sonrió tranquilizando la preocupación del peligris, el cual volvió a llenar de besos y mimos a su bebé, porque Jimin era el bebé de Yoongi, su pollito de arroz como tanto ama llamarle.

Unas horas despues al menor le dio hambre, así que Yoongi bajó a la cocina del departamento donde vivía a buscarle comida a su amorcito. Preparó una simple sopa de verduras, con carne de cerdo favorita de su pollito y llevó jugo de frutas para acompañar, subió otra vez ahora encontrándose a Jimin sentado en la cama intentando ¿Respirar? Entonces Yoongi dejó lo más rápido posible la comida en alguna parte de la habitación y corrió hasta su pareja, no entendía que sucedía pero a su bebé se le estaba dificultando respirar y eso le preocupaba. Hizo lo posible para ayudar al menor, sacudió una revista frente a su rostro para darle aire, Yoongi no tenía idea alguna de que hacer, pero no por eso se quedaría de jodidos brazos cruzados viendo a su pollito en ese estado.

Una vez Jimin ya se encontraba mejor, Yoongi lo sentó en su regazo —¿Estás mejor, bebé? —

—No te preocupes Amor, estoy bien —

—¿Por qué sucedió eso pollito? —

—No tengo idea cariño, pero estoy bien en serio ya pasó —

Yoongi suspira y mira preocupado a Jimin —Jimin, estás mintiendo, si sabes ¿Por qué no me dices —

El peligris comenzaba a sospechar y con razones, ese día su pollito había actuado muy extraño, desde encerrarse en el baño por una llamada hasta mentirle dos veces, no era para nada algo normal en Jimin y eso preocupaba al mayor, necesitaba saber que demonios le ocurría a su bebé, no iba a dejar que una situación así vuelva a suceder.

거잣밀 ; Lie. ↬YᴏᴏɴMɪɴ.↫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora