[1] JESSICA JONES » Steve Rogers

Capítulo 5

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CAPÍTULO 5

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Jessica trató de sostenerse de la mesa para evitar caerse pero no podía parar de mirar, la imágenes y los periódicos que habían informado sobre el accidente, que realmente no lo había sido.

—Jess —susurró el capitán y puso su mano en el hombro de la chica.

—HYDRA creó un mundo tan caótico que la humanidad ya está lista para sacrificar su libertad para obtener su seguridad. En cuanto de complete un proceso de purificación, se alzará un nuevo orden mundial de HYDRA.

Steve apretó la mandíbula enojándose cada vez más.

—Ganamos capitán, tu muerte vale lo mismo que tu vida, un total de cero.  

Teniendo suficiente, Steve golpeó la pantalla con el puño haciendo que esta se rompiera y Jessica se sobresaltara. El rostro de Zola volvió a aparecer en una pantalla diferente.

—Como les decía...

—¿Qué hay en la memoria? —el rubio interrumpió.

—El proyecto Insight requiere percepción, así que diseñe un algoritmo.

—¿Qué clase de algoritmo? —preguntó Natasha.

—La respuesta a tu pregunta es fascinante. Desafortunadamente, no podrán oírlo estando muertos.

Las puertas se cerraron, Steve trató de detenerlas usando su escudo pero no lo logró. El dispositivo de Natasha comenzó a sonar.

—Chicos, se acerca un proyectil, es un misil de corto alcance. Treinta segundos como máximo.

—¿De quién es? —preguntó Steve.

—SHIELD... —Natasha respondió.

—Temo que te hice perder el tiempo, capitán... 

Natasha se apresuró a sacar la memoria, Steve abrió un escondite en el suelo y la pelirroja saltó al hoyo.

—Admítelo, es mejor así, a ambos se nos terminó el tiempo...

El capitán agarró a Jessica de la cintura y juntos saltaron al hoyo cuando el misil explotó y el lugar empezó desmoronarse. Steve levantó el escudo para protegerlas de los escombros y todo se volvió oscuridad. Cuando se terminó, Steve empujó la pared de concreto con mucho esfuerzo. 

—¿Steve? —escuchó la voz débil y acuosa de Jessica.

—Aquí estoy —movió su mano libre de escudo para tocar el rostro mojado y el rubio soldado pudo escuchar la respiración agitada y temblorosa—. Tranquila aquí estoy, respira.