Capítulo 17

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El saca la camiseta de manga larga negra que en esos momentos vestía sobre su cabeza regalándome la imagen de esos envidiables abdominales que se contraían al más ligero de sus movimientos

Se detiene en el descenso de sus pantalones, puedo ver el bulto de su erección sobre la tela, sé que está esperando ver mi reacción antes de continuar, de ir más allá

La última vez casi muero, estuve varios días hospitalizado y fue doloroso como la mierda, solo un demente no estaría cagandose del miedo de volver a revivir la misma experiencia y con el mismo Jodido alfa, así que realmente debo de haberme fundido los sesos, cuando soy yo quien desabrocha su pantalón y libera con manos torpes su hombría de la ropa interior negra que le cubre

-prometo ir despacio-dice posicionándose sobre mi

-aguarda- lo detengo y él se incorpora nuevamente desconcertado, tomo nuevamente la mordaza entre mis dientes y asiento en su dirección

Lleva ambas manos a su rostro y reprime una pequeña risa - vas a matarme

Me conformo con que él no me mate a mi

Se posiciona entre mis piernas llevando mis muslos a los costados de sus caderas, se alinea con mi entrada y se inclina hasta rozar el lóbulo de mi oreja con sus dientes

-relájate... y respira profundo...- comienza a entrar, y tan pronto como empieza a abrirse paso en mi me doy cuenta que no voy a ser capaz de soportarlo, la última vez no fue tan difícil, ahora ante su sutil avance tengo la sensación de que voy a romperme literalmente por la mitad

-cálmate, solo respira- juro que trato de hacerlo, pero la orden parece no llegar a mis pulmones, solo atino a dar torpes bocanadas de aire, intento acallar mis quejidos con la mordaza, y mis ojos se comienzan a nublar con esbozos de lágrimas, estoy apunto botar a la mierda la mordaza y rogarle que pare

Que mierda de Omega resulté ser, un completo marica para la hora de la verdad, pongo una mano en su pecho para indicarle que pare, esto me sobrepasa, y ya estoy comenzando a sollozar, no sé cuánto podré contener mi voz por más tiempo

-no puedo... perdón

El me mira y besa mi frente -lo sé, no estás en celo, es normal que ahora sea más doloroso... pero perdóname tu a mi...

- ¿Por qué?

una de sus manos cubre mi boca y susurra en mi oído- por lo que estoy a punto de hacer... relájate para mi Yurio- su voz alfa retumba en mis oídos y hace eco en mi cabeza, de repente me encuentro abrazando sus hombros y abriendo mas las piernas, el vuelve a intentar entrar en mi y yo curvo mi espalda cuando se encuentra por completo en mi interior, arde, me voy a quebrar en mil pedazos, y solo atino a aferrarme aun mas a su cuello,, lo he tomado por completo y aún estoy en una pieza, respiro rápido, pero consigo acompasar mi respiración, mientras el masajea mis muslos y glúteos

-buen chico...- besa las lagrimas que corren por mis mejillas antes de perderse en su mano que cubre la mitad de mi rostro

Aun no se mueve, se que espera a que la incomodidad pase, deposita mi espalda sobre la cama y comienza a masturbar mi miembro a media erección, es demasiado bueno, muerdo la palma de su mano para no dejar escapar los sonidos traicioneros que amenazan con escapar de mi garganta,

Sus ojos se oscurecen y ve con esa misma mirada de hace semanas atrás, la primera que recuerdo en esas bellas y masculinas facciones, Otabek se ha ido, ese que mira fijo, con hambre, es el alfa en celo... oh mierda

Y comienza a moverse, moverse enserio, mi anterior lloriqueo de niñita no tiene comparación con lo que estoy sintiendo, enserio me va a matar, necesito pedirle que se detenga, lucho para liberarme de la mano que mantiene firme sobre mis labios, cuando lo logro, la remplaza con sus labios que comienzan a darme un beso violento, con choque de dientes, siento mis sangre en la punta de mi lengua, ese hijo de puta acaba de abrirme el labio inferior, repentinamente en una des sus embestidas toca un punto profundo en mí que hace estallar chispas tras mis parpados y una oleada de calor subir desde mi espalda a la nuca

-eso es...- sisea volviendo a su tarea pero esta vez atormentando a una de mis orejas con sus colmillos, escucho su respiración fuerte y pesada, acompañada de gruñidos casi animales brotar de su garganta, esto no esta haciendo más que excitarme aún más, estoy cerca, y quiero gritar hasta desgarrarme la garganta, pero el poco raciocinio que tengo me obliga a buscar una nueva mordaza, me acerco a su cuello y tomo una generosa porción de piel y muerdo fuerte, dejándome llevar por un fuerte orgasmo que se riega entre nuestros vientres, el me atrae mas hacia si en un fuerte abrazo y me mantiene cerca de él hasta que las sacudidas del orgasmo pasan

el acaricia mi espalda hasta que suelto su cuello al fin, ha quedado bastante lastimada esa porción de piel y estoy aterrado, no se mucho de alfas y omegas, pero se que esta mierda es al revés

le miro asustado, pero el parece extrañamente complacido- chico travieso ¿acaso quieres marcarme tu a mí?

-yo...

-tienes que hacerlo más fuerte, hasta atravesar la piel, permíteme- toma mi mentón y lo gira hacia la izquierda, toma una porción de piel y comienza a presionar sobre mi cuello, mientras reanuda el movimiento de sus caderas, aun no me recupero del anterior y siento un nuevo orgasmo comenzar a formarse en mi vientre, mientras el Alfa parece empecinado en arrancar un trozo de mi piel, no me importa si lo hace, si me rompo en mil pedazos, si termina devorándome hasta los huesos, lo deseo

Ahí viene. Aprieto fuere los ojos y siento la sensación quemante de mi piel al ser cortada por sus colmillos una vez más, al mismo tiempo que su nudo se forma en mi interior, araño su espalda en un intento de encontrar estabilidad y le siento hacerse cada vez mas grande dentro de mí hasta llegar al limite de lo insoportable, el gruñe para mi aun aferrado a mi garganta y es suficiente para hacerme llegar, esta vez no hay nada entre mis labios para acallar mis gemidos

y caigo como muñeca de trapo entre sus fuertes brazos, aun respirando con dificultad, aun con su nudo atrapado en mi interior

-ya quiero que baje esto...- dice mientras juega con el cabello de mi nuca despreocupadamente. No me atrevo a decirle que esta posición, aunque incomoda me hace sentir confortable, protegido- me muero por hacerlo de nuevo

Yo le volteo a ver con verdadero horror ¡¿Acaso este idiota pretende hacerlo hasta que me desmaye como la vez pasada?!

El me mira con esa estúpida sonrisa de suficiencia -la noche aun es joven Gatito...

Oh mierda, este cabrón enserio me va a acabar matando  

Oh mierda, este cabrón enserio me va a acabar matando  

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Gato Calico ~ Omegaverse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora