La predicadora (camren)

Capitulo 2

Camila POV
Debían ser las 10 y media o así cuando escuché el timbre sonar. Entreabrí los ojos pensando en si lo había soñado o lo había escuchado de verdad, esperé un momento y lo volví a oír. Cerré fuertemente los ojos frustrada por no poder acabar mi maravilloso sueño. Golpeé la almohada antes de levantarme para ver quien era la persona culpable de no estar de camino al planeta plátano donde yo iba a ser la reina y poder comer tantos plátanos como quisiese.

Mientras iba caminado por el pasillo, nuevamente escuché el ding don de mi timbre y si ya estaba algo enfadada porque esa persona haya interrumpido mi sueño ahora estaba echando humos. ¿Además de destrozar mis fantasías se impacienta llamando cada 5 segundos? Ahora si, quien sea me va a oír.

Aceleré el paso y llegue a la puerta abriendo rápidamente, allí me encontré a dos chicas de espaldas dispuestas a irse, una bajita, incluso más que yo... y la otra de mi estatura un poco más alta. Las dos llevaban el pelo suelto y unas faldas realmente largas.

Al darse la vuelta pude ver sus caras, la bajita tenía una gran sonrisa que solo con verla me daban ganas de sonreír, pero no lo haría porque por su culpa no estoy en mi cama durmiendo. Miré a la otra chica y vi sus preciosos ojos verdes, nunca había visto unos así, eran hermosos. Después de recuperarme de aquella mirada me sentí rara por un momento, luego recordé porque estaba allí.

—¿Habéis llamado vosotras?—pregunté más enojado de lo que pensé.

—Si —contestó la sonriente muchacha.

—¿Y que queréis? me habéis despertado —dije cruzándome de brazos, esperando su respuesta.

En ese momento la de baja estatura se acercó a mi y llamó a su acompañante para que se acercara ya que se había quedado parada con la vista perdida en algún punto interesante de mi jardín. Finalmente las dos estaban enfrente a mi, la chica de ojos bonitos miraba a cualquier lado menos a mi ¿que le pasa, toca mi timbre y después no es capaz de mirarme a la cara?.

—¿Y bien?¿Para llamabais a mi casa?—pregunté ya un poco impaciente, queriendo terminar rápido para volver a mi cama e intentar retomar mi maravilloso sueño.

Rápidamente ellas sacaron dos revistas y una Biblia. En ese momento me di cuenta... eran testigos de Jehová y... les he abierto la puerta... ¿por que me pasan a mi esta cosas?¿por que tengo tan mala suerte? ¿Por que no miré por la mirilla antes de abrir? Soy estupida podría haber sido un asesino en serie... aunque ahora mismo no se cuál sería peor... vale, ya me calmo, tampoco es para tanto ¿no?

—Hola buenas, somos testigos de Jehová. Yo soy Ally y mi amiga se llama Lauren—señaló a su acompañante que estaba con la cabeza gacha—¿tiene 5 minutos para hablar sobre la palabra del señor?—preguntó ella mostrándome una revista que ponía en grande ¡Despertad! Cuando iba a responder negativamente, ella no me dejó y continuó hablando.—le podemos mostrar esta revista que habla acerca de los problemas en el mundo y como dice la Biblia que debemos afrontarlos—Terminó ella y "disimuladamente" le dio un codazo a la ojiverde que estaba distraída. Iba a negarme pero antes de poder abrir la boca la joven empezó a hablar.

—Em... S...Si, mucha gente se pregunta por qué parece que el mundo cada vez va a peor—Leyó nerviosa la chica, se veía muy tierna trabándose mientras leía, no la estaba escuchando, solo la miraba.—La Biblia dice: "no pertenece al hombre que está andando siquiera dirigir su paso" (jeremías 10:23). Esta revista explica como millones de personas creemos en un mejor futuro.—terminó de leer la muchacha y me vio directamente a los ojos, nos quedamos lo que me parecieron horas mirándonos sin decir nada, hasta que su amiga continuó con la demostración y ella nuevamente volvió a bajar la mirada al suelo un poco sonrojada... interesante...