La Mirada Que Te Acecha (Nathaniel x Sucrette) PAUSADA

Capítulo 9

N/A: Chicos, cambié la estructura del texto a una más profesional :vr Así que, de aquí en adelante verán este formato. Igualmente voy a corregir los otros capítulos, pero de seguro que es cuando complete esta historia.

B) Quedarse y esperar a Armin.

Fui en dirección de Mónica y me senté a su lado. Estaba un poco nervioso, pero ella se encontraba tan ebria que seguro no recordará nada de esta noche.

-Oh, pero si es mi acosador personal- Me apuntó con una sonrisa. Así que ya se dió cuenta... ¿Debería raptarla? No, eso será para otra ocasión...

-Así es, un gusto en conocerte Mónica, soy Nathaniel tu acosador personal- Hice un reverencia y ella lanzó una carcajada.

-Todo me da vueltas... Creo que voy a vomitar- Mónica vomitó bajo mis pies.

-Ya, está bien... Mejor te llevo a casa- Dije y la tomé en brazos.

-¿Qué te crees...? ¿El príncipe de algún Cuento? Déjame informarte que no existen- Susurró a mi oído y después rió.

-Mhm, me gusta más eso que ser tu acosador personal... En realidad no. ¿Dónde vives?- La senté de copiloto, le abroché el cinturón y me subí al auto. Me dirigí al lugar que me indicó. Sabía su comuna, pero nada más. Me entretenía más viendo sus fotos que averiguando dónde vive.

Entonces, nos bajamos en un barrio que lucia normal. Sin embargo, cuando entramos a su casa di un vuelco brusco de mi realidad. Era más bien una choza a punto de colapsar, que a pesar de matenerse la limpieza tenía tablas sueltas y las paredes eran escalofriantes de ver. Incluso el techo estaba inclinado y se oían muchos ruidos.

-¿Mónica?- Se escuchó una fuerte y dulce voz proveniente de una niña pequeña.

-Hey, hola soy un conocido de Mónica. Se quedó dormida, así que...- Dije.

-Pasa, aquella es la habitación de mi hermana- Apuntó a la primera pieza de la izquierda. La niña encendió la luz y en medio del desastre dejé a Mónica en su cama.

-¿Eres un compañero de mi hermana?- Me preguntó la pequeña.

-No, vamos a la misma universidad, pero estamos en distintas carreras- Contesté.

Me analizó con la mirada y me invitó a tomar el té. Yo acepté sin dudarla, esta era una oportunidad tremenda para acercarme a Mónica.

Sobre la mesa habían cartas con letras en tinta roja; Deudas.

–No las mires, por favor– Me interrumpió la pequeña. –Nos hacen ver penosos– Fue triste saber que era conciente de ello.

–No, debieron trabajar bastante para que no lo notara– Le sonreí.

La hermana de Mónica me sirvió té y unas galletas.

–Las hice yo, sé que aún me falta por aprender–

–Están muy ricas– La interrumpí comiendo de sopetón.

–¿En serio? ¡Me hace feliz escucharlo!– Se entusiasmó y continuamos conversando por un tiempo más. Inclusive la llevé a dormir. Tenía un dormitorio compartido, le faltaba su propio espacio personal, sin embargo no me mostró indignación.

Después de que me fuera, me quedé pensando si podía hacer algo por ayudarlas. Entonces, lo primero que se me ocurrió es que debía hablarle a Mónica. No le iba a dar más rodeos. Mi mente tomó conciencia de cosas que había pasado por alto. Hay gente que no vive bien, mientras yo disfruto acosar a una pobre persona que tiene de por si una miserable vida, haciéndola peor. Provocando el miedo y que se aparte aún más de las personas.

Ni siquiera presté atención a los berrinches de mi hermana. Subí a mi habitación por el elevador de cristal. Me senté en mi espacioso escritorio. Encendí mi computadora y rebusqué en su vida. Su pequeña hermana es una excelente alumna de un pobre colegio, que lo más probable es que cierre pronto. Sus padres tenían buenas profesiones. Buenos títulos, pero... ¿A dónde se iba todo el dinero? Deudas. ¿De qué? ¿Cuáles?

Me revolví la cabeza. No tenía acceso a todo el sistema. ¿Cómo ayudar a Mónica? ¿Qué podía hacer? Es obvio que no aceptarían mi dinero así sin más. Solo había una solución... Conocer a Mónica.

Hola! VOTA y COMENTA para más! Sé que no he subido hace tiempo u.u pero, lo hice xd Ya saben que cada capítulo es corto, así que intentaré subir más subido. Nos vemos! ^^