Cap. 6

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No puede ser que justo haya venido a este .- decía yo en el baño de mujeres, mientras Tati me escuchaba- Siento que les va a decir a todos que estuve roja como tomate solo por un rato de gimnasio.

Ya había acabado por fin el acto de apertura a este año. Ya habíamos terminado de hablar del tema y fuimos por el pasillo. Me había apartado por completo de Marco, no quería hablar con él, tampoco con Jessi ni con Kian. Solo quería llegar a mi clase sin encontrarme con ningún conocido.

Esta escuela es grande, así que por lo menos eso está a mi favor.

Me dirijía hacia mi clase, entré al salón, puse mis cosas en mi casillero asignado y me senté en una mesa muy alejada del resto de la humanidad. No quería hablar con nadie.

La profesora entró al aula, llevaba varias carpetas. Detrás suyo entraban atrasados Kian, para mi desgracia, Zoey, una chica dulce de la clase, y Marco.

El último me miraba desde la puerta, aún pienso que es un poco psicópata, pero es buena onda por el momento.

Kian se sienta detrás mio y Marco se sienta en la otra esquína. Quiero matar a Kian por sentrarse detrás, pues me incomóda su presencia.

La estúpida de mi mejor amiga eligió
arte y yo elegí música. Ella siempre me dijo que eligiría música, pero me traicionó. Zoey se sentó a mi lado y por lo menos fué un poco más cómodo estar en el aula.

Sentí como Marco me miraba, y lo encontré varias veces mirandome con seriedad, y cuando yo lo sorprendía, miraba su cuaderno nervioso. No sabe disimular.

Porfin terminó la clase, salí rápido de ahí pero una mano interrumpió mi pasó, me dí la vuelta y ví al mardito de Kian, mirandome con gracia. No le dí el gusto y le saqué la mano, pero mi intento fué inútil, el es demasiado fuerte.

-Por favor, actúa como una niña grande y deja tu idiotez- me dijo mientras yo intentaba no darle un puñetazo.
- Y tú dejame vivir mi vida, para.

-¿Acaso no recuerdas lo que te dije por teléfono?

-¡Claro que lo recuerdo! Y también recuerdo que te dije psicópata, y ahora se manifiesta.- le dije yo mientras intentaba sacar su mano. No podía, y esto se estaba comenzando a volver aterrador.
-¿No te libraras de mi, me escuchaste?- me dijo mientras susurraba gritando, poniendo su otra mano en mi cuello- Tú eres mía, solo mía, y que no se te olvide.- me suelta mientras que una lágrima se aproximaba. Se fué rápido hasta otro lugar que no me atreví a ver. Jamás me había tratado así, nunca en mi vida alguien me había hecho eso.

Marco se acercó a mí preocupado, pues estaba llorando desconsolada, evidentemente tenía miedo, pues me amenazó aunque sin una amenaza, no sé como explicar mi sentimiento de angustia y pena.

-¿Está todo bien?- me pregunta Marco preocupado. - Por qué lloras, me desesperas.

-No me conoces Marco- le digo mientras seco mis lágrimas- por qué te preocupas de como estoy, y si te lo preguntas, estoy bien, solo... tuve un mal recuerdo.
-Espero que sea verdad- me dijo- y también espero que sepas que, si, me preocupas, desde que te ví roja por hacer un poco de elíptica- me decía entre risas, a las cuales yo me uní también.- me debo ir, cualquier cosa me avisas, nos vemos.

-Nos vemos- le dije yo mientras el se iba viendome por momentos.

Su atención me hizo sentir segura.

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Holiii, bueno. Solo quería dcir que aquí tenemos al mardito de Kian en multimedia ewe.

Listo, eso. En el otro capítulo les muestro a Jessi. Byeee

-Potter ⚡

Por Una ApuestaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora