3:00 AM. ADAPTACIÓN || L.S ||

» Capítulo 09.

 »Louis Tomlinson.
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Escondí la botella de cera dónde supuse nadie la encontraría, me pegue a la pared y espere a que Harry llegara.
A los pocos minutos Harry apareció por él pasillo y corrió hacia mi, supe ahí que era lo que tenía que hacer.
Corrí hasta él armario dónde se encontraban todas las cámaras de seguridad. Abrí la puerta girando el pomo rápidamente, podía sentir la adrenalina en mis venas.
Él sudor en mis manos ya no era muy abundante, era como si yo estuviese hecho para hacer esto.
Cuando miré al frente un cuerpo se encontraba sentado sobre la silla, no me preocupe porque sabia perfectamente de quien se trataba.
Sus ojos rojizos brillaban con él reflejo de las computadoras, todo estaba obscuro y era mejor. Él me indicó que tomara asiento junto a él, y así lo hice. Miré las computadoras frente a nosotros y solté una risa cuando todas las personas comenzaron a caer al suelo a causa de la cera que había tirado en él. La risa malvada de Harry inundo mis odios. Era como una bella melodía que hacia bailar a los demonios en mi interior. Me giré y lo mire. En sus ojos ví reflejada mi perdición, mi tormento, mi infierno y aún así me enamore. Él comenzó a acercarse lentamente a mi hasta rozar sus labios contra los míos. Cerré mis ojos y espere a que él me besase. Con cuidado fue juntando nuestros labios uniéndose en un beso sumamente peligroso. Besarlo era como rozar él pecado con los labios, y mierda, como me encantaba disfrutar del cielo y él infierno combinados.

Después de todo yo no termine siendo el niño bueno y correcto. Termine siendo el problemático, burlon, irresponsable y con pecados irreparables.

Yo le había entregado él alma a Harry. Pero también mi cuerpo.
¿Qué seria de mi ahora?

Dos semanas habían pasado y al parecer la mayoría de las personas habían notado mi cambio radical, ya nadie me tomaba él pelo o se metía conmigo. Al parecer se habían corrido rumores sobre Harry y su vida, queriéndolo culpar a él sobre mi comportamiento. ¿Por qué simplemente no cerraban su boca?

Era mi puto problema, era mi vida y nadie tenía derecho a meterse en ella. Menos idiotas como ellos.
Quizá yo estaba confundido y comencé a llamar él infierno "amor", pero joder, es que yo amaba tanto a ese chico, es cierto que amaba esa persona hecha desastre. Yo conocí su infierno y aun así decidí quedarme. Pero lo cierto era que nadie sabia sobre mi pequeño infierno dentro. Si, para mi él infierno era él amor no correspondido. Él no se enamoro nunca, y yo si, esa fue mi condena a este infierno en él que él me había abierto las puertas, y yo de tonto entre, dejándome consumir lentamente.

«⛅»

Llegué a casa y aceleré mi paso hacía mi habitación lo mas rápido que pude para que mamá no me escuchara.
Pero mis intentos habían sido totalmente fracasados, escuché los llamados de mamá y me giré para mirarle.

Su postura esta firme y su rostro, genial, su rostro lucia muy molesto.

— ¿Que?

— ¿Cómo que qué? Me han llamado de la escuela Louis, tienes más de 6 reportes, robas las tareas, respondes a los profesores y me dices; ¿qué? —me miró incrédula y con un ligero hilo en su voz, esta comenzaba a entre cortarse—. ¿Qué te está sucediendo Lou?

—Nada. —rodé los ojos y cruce mis brazos sobre mi pecho.

— ¡NO ME DIGAS QUE NO TE PASA NADA! YO SE QUE ES POR ESE CHICO DEL QUE TUS MAESTROS HABLAN, ÉL TE A VUELTO LA PERSONA QUE ERES...

—NO, —alce la voz, ahí iba de nuevo—. A ÉL NO LO METAS, ÉL NO ME A HECHO NADA..

— ¿Entonces que es lo que pasa? Cuando venga tu padre le diré sobre esto y-

No pude evitar soltar una gran risa haciéndola callar.

— ¿Mi padre? —me burle en su cara—. ¿Ese que nunca está? ¿El que no se toma ni un minuto para venir a sus casa y preguntar como esta su hijo y su esposa? ¿Ese que posiblemente te engaña con otra...?

No pude terminar la oración porque mi rostro se encontraba rojo. Mi madre me había plantado una tremenda cachetada. Trage en seco y no pude evitar no sentirme mal.
Justo cuando mire al frente él se encontraba frente a mi y miraba la escena perdido. Era como si esto no estuviese en sus planes.