El encuentro

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“-¿Tu peor enemigo?
-Mi mente
-¿Por que ella?
-Porque ella conoce todas mis debilidades.”


Nuevamente la chica rara ocupa el primer puesto, yo ya he tomado nota mental de esto y voy a sentarme en el segundo puesto mañana. La curiosidad que siento por ella es más fuerte de lo que creía. Llevo una semana viendo sus mangas agarradas en sus manos hechas un puño y eso me llama mucho la atención. Su forma de vestir, su siempre alta coleta, su rostro sin maquillaje, ella es muy distinta a las demás, y eso la hace ser “rara”.

El profesor habla y solo la mitad de la clase le pone atención. Los ojos de la chica siguen a este de un lado al otro del salón, ella baja la mirada y escribe lo que le parece importante. 

-Ya, amigo –me codea Zayn-. Va a darse cuenta que la miras, ¿en serio quieres salir con ella?

-No, no quiero –frunzo el ceño y aparto mi mirada de ella-. Solo quiero saber más de su vida.

-¿Para qué? No se relaciona con nadie, nunca vas a saber de ella, no insistas.

-Me llama la atención.

-Siempre te fijas en morenas de ojos claros, ella no es así.

-¿Y eso que tiene que ver? No he dicho que me guste, solo he dicho que me llama la atención, despierta mucha curiosidad en mí, demasiada y asusta.

Liam me golpea la espalda.

-¿A que no saben con quién saldré este fin de semana?

Recién es lunes y Liam ya tiene una cita. Que maldito mujeriego.

-¿Con quién?

-Frida –sonríe.

Zayn ríe levemente.

-No los veo juntos, ¿Frida y tú? ¿Qué haría ella con un zángano como tú? –se burla Zayn.

Me río un poco y me doy la vuelta para seguir contemplando a la chica que tanto quiero conocer. Tiene que pensar algo que me ayude a acercarme a ella, que le llame la atención mi presencia, quiero ayudarla, ser alguien en quien ella pueda confiar. La veo muy sola, y su mirada el viernes por la tarde, indicaba rastros de lágrimas y unas leves bolsas bajo sus ojos.

En el primer receso, _______ no está por donde siempre andábamos todos, eso despierta una nueva curiosidad en mí. En el segundo receso, tampoco está por allí. La última clase del día, es gimnasia, algo que a nadie le gusta. Siempre debemos trotar alrededor del campo de juego y más tarde nos separan, hombres por un lado, mujeres por el otro.

Me encuentro con Mark, el novio de Shay, en los vestidores. Hablamos un momento y nos gastamos bromas. No quedan muchos chicos en el lugar, ya casi todos se han ido a casa.

-Shay me dijo que estuvieron todo el fin de semana juntos.

-Créeme que lo sé –se ríe.

-Depravado, te pido que no des detalles.

-No iba a hacerlo –vuelve a reír-. ¿Sabes que escuché hoy durante el almuerzo?

-No, si no me dices, no sabré nunca –digo, atando los cordones de mis zapatillas.

-Me dijeron que vas a salir con esa chica.

-¿Qué chica?

-La chica del frente, la chica rara, la chica emo, esa cosa.

¿Esa cosa? ¿Se refiere con ese adjetivo a una chica que ni siquiera conoce?

-No voy a salir con ella –niego con la cabeza-. Ni si quiera sé cómo se apellida.

-Miller, es ______ Miller.

Un punto para mí.

-Oh –asiento-, ¿sabes algo más de ella?

-Si, que está loca y nunca va a ningún sitio.

-Hermano, eso me confirma que no sabes nada de ella.

Se ríe.

-¿Por qué lo dices?

-Porque dices que está loca y sin embargo no creó que hayas cruzado palabras con ella alguna vez.

-Se nota a kilómetros, Niall. ¿Alguna vez has visto que se suelte las mangas del buzo?

-No, pero eso no significa que esté loca.

-¿Y por qué lo hace?

-¡Yo que sé! Pero por alguna razón será. 

-La defiendes… si te gusta.

-No me gusta –refunfuño y cierro mi casillero-. Simplemente la defiendo porque hablan sin saber, no la conocen, solo saben su nombre.

Revolea los ojos.

-Como digas.

Le golpeo en el hombro.

-Calma, chico –se ríe.



El martes por la mañana llego al colegio un poco tarde, son pasadas las siete treinta cuando entro al salón. La campana ya ha sonado cinco minutos antes, pero la profesora de historia algo me quiere y me deja quedarme en su clase. No puedo sentarme detrás de _____ y no voy a ocupar el puesto a su lado. Primero porque ella va a sentir un acoso que no quiero que sienta y segundo, porque al parecer le gusta sentarse sola.


-Tienen que ponerse en parejas, no voy a elegirlas yo, pero si deben tener todos su pareja.

_____ alza la mano.

-Somos treinta y un alumnos, no se pueden hacer quince parejas justas. Queda alguien solo.

Me extraña mucho su comentario. Recorro el salón con la vista y noto que es cierto, están todos los bancos dobles ocupados, menos el de ella, donde solo está ella y su mochila.

-Un grupo de tres –dice la profesora.

Zayn y Liam voltean a verme como si la profesora hubiera anunciado algo increíble. Lo cierto es que yo ya tengo otro plan.

-¿Y no puedo ser yo sola? –pregunta por lo bajo.

La profesora le sonríe y asiente levemente. Luego ella sigue tomando apuntes. Me deslizo de mi silla y corro hasta sentarme al lado de ella. Alza la vista y la fija en mis ojos, le sonrío levemente. Sé ligar con chicas, pero eso no es lo que quiero hacer con ella. ¿Qué hago?

-Hola –digo suavemente.

Voltea a ver detrás de ella y luego vuelve su mirada a mis ojos. Pone una mano en su pecho y se señala a sí misma

-Si, a ti.

Frunce el ceño levemente.

-Hola.

-Hay que hacer parejas para el trabajo de fin de trimestre y me preguntaba si tú quieres ser conmigo.

-Soy ______ Miller –me dice extrañada, casi como aclarando las cosas.

-Ya sé –le sonrío.

-¿Entonces…?

-Te estoy preguntando si quieres ser mi pareja para el trabajo.

-¿Yo?

-Si, tú –digo alzando los hombros.

Niega con la cabeza y vuelve su vista al frente. Coloco los brazos sobre la mesa y los cruzo.

-Voy a ser sola, siempre soy sola, no tengo inconveniente –explica rápidamente.

-¿Y si esta vez tienes pareja?

-Ya comprendo, quieres aprobar el trimestre y necesitas alguien que sepa de que va la materia.

Frunzo el ceño y niego con la cabeza. Ella se pone de lado para verme a los ojos.

-No es eso. Simplemente quiero ser contigo.

-No te pases, sé que me has seguido la semana pasada.

Me quedo callado. Junto mis labios en una línea recta y los presiono. ¿Cómo se ha dado cuenta de aquello?

-Ya puedes volver a tu lugar, haré el trabajo por los dos, no tengo problema con eso.

Va saliendo mal mi plan. No necesito que me haga el trabajo, necesito estar con ella para conocerla.

-No quiero que hagas eso.

-Vamos, de todas maneras haré el trabajo yo sola, no necesito que me fastidien mientras lo hago.

Bajo la mirada a sus manos, estas agarran el buzo con fuerza y lo retuercen en el puño. Se siente incómoda y se remueve en su asiento.

-Solo quiero ser tu compañero, voy a colaborar en el trabajo.




El miércoles llego al colegio y hago lo normal. Después de Oops! Liam coqueteando con Frida, voy hasta mi casillero y saco los libros que voy a necesitar. Meto mi chaqueta allí adentro y guardo los libros en la mochila. Al cerrar mi casillero veo a ______ abriendo el suyo. Lleva unos vaqueros oscuros, una trenza que cae sobre su hombro y una campera rosada, que hace juego con sus zapatillas. Saca sus cosas y cuando cierra la puerta, se pasa las mangas de la campera por debajo de sus ojos. Obviamente las tiene sujetas con sus manos, vuelve a pasarla por debajo de sus ojos y sorbe su nariz. Respira profundamente y se cuelga la mochila al hombro para echar a andar por el pasillo.

-Oye –estiro una mano en su camino.

Ella se detiene y voltea a verme. 

-Hola. –Baja la mirada a sus manos.

-Hola, ¿estás bien?

-Si –susurra-, estoy bien.

-Eh, bueno, ayer cuando llegué a casa recordé que no te había dicho mi nombre y yo si sé el tuyo, entonces fue grosero de mi parte.

Hace una mueca, sin alzar la vista y asiente.

-¿Segura que te encuentras bien?

Vuelve a asentir.

-Bueno, soy Niall Horan.

-______ Miller.

Le sonrío, ella no me está viendo. ¿Por qué miente? Está conteniendo las lágrimas y sin embargo dice que se encuentra a bien. O quizá no tiene la suficiente confianza para decir por lo que está pasando.

Suena la campana.

-Me voy a clases –dice rápidamente y sale corriendo.

Invisible (Niall Horan y ______)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora