P E R A || EN PAUSA

Capítulo 7

Al terminar la jornada salí directamente al club.

Al llegar los gritos se lograban escuchar desde la entrada, cuando me acerco veo que Helana se encuentra sentada mientras Alba le grita

-¡¿Cómo se te ocurre golpearlo por una muñeca?!- le da una bofetada- ¡Por una maldita muñeca!

-¿Qué sucede? - me acerqué a Carla cautelosamente

-Cómo lo escuchas, golpeó a su primer cliente por haber traído una muñeca – rio- Y yo que pensé que era la única loca aquí

Me quede observando mientras la gritaban

No podía hacer nada

Si me entrometía nos iría peor a las dos

Cuando faltaba poco para salir y todas se habían alejado me acerqué

-Deja te ayudo - dije tomando la brocha

-Gracias- sonrió levemente

Durante unos segundos incómodos mientras le ayudaba a maquillarse Helana habló

-¿No me vas a preguntar o te vas a reír?- me miró a través del espejo

-No, solamente esperaré a que tú misma me digas- le devolví la sonrisa

Suspiró

-Las muñecas siempre me han traído mal recuerdo, durante mi niñez -fue interrumpida por los chasquidos de Alba

-Menos charla, en 3 salimos

-No, olvídalo - tomo nuevamente la brocha y termino rápidamente de maquillarse

-Bien

Salí directo a mi pequeño tocador, recogí mi cabello y termine mi maquillaje

Después pasamos a cambiarnos, se nos repartieron antifaces

Esta noche valdría la rutina y cuerpo

Rostros fuera

Inicio Ashley, seguido de Carla para después continuar yo.

Play de Goapele empezó a sonar y está vez sólo me deje llevar, los billetes y colillas de cigarrillos no dejaban de caer, solo conseguía concentrarme en la música, mis manos viajaban por todo el tubo, los chasquidos de la canción guiaban mis pasos, solo soy una con la música hasta que me doy cuenta que la canción ha terminado y los aplausos resuenan en el lugar, sonrío y me retiro de la tarima.

-Sienna, te esperan en la habitación 3, plan A – Me dice Alba mirando su planilla al llegar a mi sitio

Sirvo un poco de agua y asiento, ella se va

Retoco un poco mi lápiz labial hasta que queda totalmente rojo, al salir de la habitación y pasar por todo el pasillo encuentro a Helana sentada en el piso frente a una puerta con sus piernas recogidas, me acerqué y la toco, levanta su cara con toda su máscara de pestaña corrida.

-¿Qué paso?- le mire preocupada

-No puedo, pensaba que si pero es imposible- volvió a bajar la cabeza mientras continuaba sollozando, solo pude sonreír, en ese momento me vi reflejada en los primeros días, era solo un manojo de nervios, varias veces caí de gran altura en el tubo frente a los clientes, se notaba a distancia que flaqueaba y sudaba a montones, reí, ella levanto la cabeza mirándome confundida

-Tranquila, ven y te acompaño- la ayude a levantarse

-¿Pero cómo?- me miro confundida mientras limpiaba sus mejillas