Desde su última reunión las cosas volvieron a cambiar. La Mila distante, serena y callada que provocaba los más horribles sentimientos en el jóven héroe de la aldea había vuelto. Era similar a una cadena sin fin la cual Naruto no podía deshacer con nada, ni con las palabras más sinceras desde lo profundo de su ser o los regalos que se esmeraba días y noches en hacer.
¿Desde cuándo su relación con el amor de su vida se volvió de esa manera? Seguía cuestionándose cada noche iluminada por la brillante luz de la luna qué fue lo que hizo mal, ¿dijo alguna tontería que marcó algún odioso sentir en su novia? ¿lo vió hablando con una chica y le estaban dando ataques de celos permanentes?
Y entre su lento e inseguro caminar, el hijo del cuarto hokage llamaba la atención de todo habitante de la aldea quien lo viera pasar con esa actitud tan extraña de ver en él. Aún si trataba de esbozar hasta una insignificante sonrisa, se le era imposible con esa chica inundando sus pensamientos.
La amaba, la amaba como nunca a nadie había amado. Siempre la tuvo su lado y perderla nunca estuvo en sus planes. Ella era su fuerza y su luz, definitivamente no sabía qué haría si llegase a perderla.
" ¿Se enamoró de otro? " aquél repentino y oscuro pensamiento pasó por su cabeza para indagarlo con más y más preguntas. Y cómo no hacerlo, si también tenía frente suyo una escena que no le agradaba para nada.
Un suspiro agotador se escapó de sus labios y, acelerando su caminar, avanzó hasta la muy agradable escena de la cual, desgraciadamente Mila era parte.— ¡Cariño! —llamó, fingiendo esa voz tan carismática que lo caracterizaba, llamando la atención de sus objetivos.
Tan rápido como estuvo cerca de su pareja, la abrazó por la espalda, besando su larga y bonita cabellera que tanto le encantaba. Su preciosa mirada de tonos azules se posó en el ajeno: un ninja de la aldea del rayo, probablemente amigo de su novia, lo cual no le importaba mucho esta vez. El ninja desconocido, bufó rodando los ojos y se alejó de la pareja, con esa enorme molestia expresada en la forma de caminar que portaba.Una vez el dichoso 'peligro' para Naruto se alejó lo suficiente, soltó a la menor, mirándola necesitado de ese amor que hace meses atrás, se demostraban mutuamente con muchos besos, mimos y abrazos.
— Naruto, ¿qué fue eso?
— Mila, ¿me amas?
Esa pregunta la tomó por sorpresa, provocando en ella una reacción de decepción a sí misma la cual, afortunadamente, el joven Uzumaki no alcanzó a ver.
Decirle que no lo quería no estaba en sus planes, puesto que Mila esmeraba a su novio y mucho, pero definitivamente, sus sentimientos no eran concisos en ese preciso instante.— Naruto... —mencionó en un ligero murmullo, el cual el ninja alcanzó a escuchar, por lo cual procuró agudizar sus oídos para ser capaz de oír su respuesta—, te amo.
Fue justo ahí, donde Naruto Uzumaki empezó a ser engañado a base de sucias mentiras.
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Lies ― Uzumaki Naruto.
Fiksi PenggemarÉl, el chico más tierno y dulce que pudo haber tenido en la vida. Y en cambio, ella sólo estaba con él a base de mentiras.