No se lo digas a Jimin (Yoonmin)

Cuando tu cabeza va a explotar

Ahora que había dicho en voz alta, y no solo en su cabeza, que le gustaba Jimin, Yoongi era incapaz de mirarlo a la cara.

Literalmente, en todo el día había estado evitando al chico porque se sentía tan avergonzado que no se atrevía a estar cerca de él, porque una parte tonta de su cabeza creía que Jimin sería capaz de escuchar los latidos acelerados de su pobre corazón cuando lo veía sonreír.

En la comida, como siempre, todos se sentaron alrededor de la mesa para comer juntos. Para buena o mala suerte de Yoongi, Jimin se sentó a su lado. Y el chico no se lo explicaba, llevaba un par de años enamorado del menor, sin embargo ahí estaba, nervioso como un adolescente por esa cercanía casual de Jimin.

Y aunque este no notó nada fuera de lo normal en Yoongi, Namjoon y Seokjin si lo hicieron. Jin veía como Yoongi se encogía en su asiento y no levantaba la mirada del plato, excepto cuando Jimin hablaba con él, entonces se vislumbraba una leve sonrisa. Le parecía adorable ver a su amigo así.

Lo que hace el amor, pensó, ese vago y gruñón se pone de los nervios con Jimin.

Entonces Jin quiso comprobar si podía provocar que Yoongi se pusiera rojo como un tomate. Justo detrás de Yoongi, en la encimera, estaban las servilletas, pensó, y si... Carraspeó y dijo:

—Jimin ¿Puedes pasarme las servilletas?

El chico le sonrió, y tan servicial como siempre le contestó:

—Claro que sí.

Jimin se giró y se sujetó en la silla de Yoongi para estirarse y alcanzar las servilletas, pero eso no era lo importante, si no el hecho de que Yoongi estaba mirando el cuello de Jimin hipnotizado. Cuando este volvió a sentarse pilló a Yoongi mirándolo pero solo le dedicó una sonrisa y le dijo:

—Tranquilo, ya te dejo seguir comiendo.

Casi por efecto reflejo Yoongi le sonrió de vuelta, una sonrisa tan de tonto enamorado que Seokjin no sabía como Jimin no se daba cuenta, pero este se limitó a pasarle las servilletas. El mayor se limpiaba sus manos, ya limpias, satisfecho, al menos Yoongi sí que estaba rojo, había valido la pena. Namjoon le dió un codazo intentando aguantar la risa:

—Deja al pobre en paz, lo está pasando mal.

Jin lo miró divertido:

—¿Tú crees? A mí me ha parecido que Jimin tarda dos segundos más y Yoongi le da un beso en el cuello.

Algo más tarde, una vez acabada su rutina de ejercicios con Jimin y Hoseok, Yoongi se había sentado en el suelo de la sala agotado y todos sus pensamientos volvían a él como en una avalancha.

Además recordaba las veces en las que discutía consigo mismo sus decisiones, sus propios sentimientos.

"Podría arriesgarme, ser valiente y declararme a Jimin ¿Por qué no?"

Porque si le decía a Jimin lo que sentía por él, el joven estaría incómodo. No se lo tomaría mal... Probablemente, al menos quería creer eso, pero todo la cercanía que tenían se iría y no podría siquiera estar cerca de Jimin sin que este se pusiera tenso. Y Yoongi no quería pasar por aquello, porque sería una tortura no tener a Jimin a su lado.

Y luego, como siempre, se hacía la misma pregunta estúpida.

"¿Pero y si Jimin...?"

—¿Yoongi?

Una voz lo sacó de su nube de pensamientos. Esa voz que conocía tan bien, lo sacó de su bola de pesimismo y lo devolvió a la realidad. Allí estaba Jimin, sentado enfrente de él con, a ojos de Yoongi, la sonrisa más bonita del mundo:

—Has aguantado muy bien la rutina, hoy era dura ¿Estás bien?

Parpadeó varias veces antes de responder:

—Sí, no sé porque lo preguntas.

Jimin rió levemente antes de decirle:

—Porque has estado todo el rato mirando ese tablón del suelo como si te hubiera ofendido.

—¿Quién te dice que no me ha ofendido?

Jimin solo se levantó, riéndose:

—Bueno, te dejo juzgando al tablón, estoy deseando ducharme.

Y apenas dijo eso se quitó la camiseta enfrente de Yoongi y se fue tan tranquilo. Sin embargo el mayor seguía sin entender aquella situación de locos.

Había visto a Jimin sin camiseta otras veces ¿¡porqué ahora estaba rojo como un tomate!?

"¿Pero y si Jimin no me rechazara?"

Esa era una posibilidad que Yoongi no contemplaba.