Capítulo 1

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El fin del verano llegó, faltaba casi una semana para entrar nuevamente a la escuela, creería que es lo peor que puede pasar para una estudiante de secundaria que va a su tercer año, la verdad es que es más que un tormento para mi ir nuevamente a la escuela, ya que no e llevado una vida estudiantil común y corriente. Mi familia constantemente a pasado cambiándose de casa, hemos pasado de un lado al otro, nada más y nada menos que por mi culpa, sí, solo por mi culpa.

He pasado casi todo el verano en esta nueva casa, que por cierto es un departamento bastante peculiar en un gran edificio. Vivo con mis padres y mi hermano, somos la familia Kim, a quien nadie conoce debido a su reciente mudanza. Mi hermano, Kim Seok Jin, se a pasado quejando conmigo todas las vacaciones, por si no fuera poco, dice que por mi culpa ni siquiera tiene amigos, y no lo niego, es verdad. Cualquiera que lo viera quejarse así pensaría que es un niño pequeño, pero ¡no!, el desgraciado es dos años mayor que yo. Está en la universidad, como es tan vago, al salir del colegio no sabía que hacer con su vida, así que decidió darse un año sabático, cuando al fin decidió entrar a la universidad, no lo logró ya que dio exámenes y no aprobó, por lo que pasó casi otro año preparándose para entrar, hasta que, sí, al fin entró, a sus 20 años va a la universidad, no sé por que se queja tanto conmigo, si después de todo le queda más cerca la universidad, ademas mis padres se la pagan, que más podría querer ese chico, pero esta bien, será uno de mis enigmas en la vida.

En cuanto a mi pues..aun sigo tratando de componerme de las experiencias pasadas en mi anterior casa que por cierto fue en una en la que mas duramos. Antes de mudarme, terminé con mi primer novio con quien duré alrededor de dos años. No terminamos porque ya no hayamos querido algo, sino más bien, nosotros sabíamos que nuestra relación no podía continuar si estábamos lejos el uno del otro. No sé en que momento me llegué a enamorar tanto de él porque sigo sufriendo por lo acontecido...eramos algo así como la pareja perfecta...pero él sabía que no podía quedarme con él, después de todo eramos exactamente iguales.

A pesar de mi "nuevo comienzo" en un nuevo lugar, donde nadie conoce a mi familia ni a mi, sé muy bien que, yo no cambiaré, seguiré siendo la misma chica. La chica mala. El apodo de "babybad"  con el cual me conocían la mayoría de personas en todos los vecindarios en los cuales había vivido previamente se había hecho famoso.

Sí, soy una chica mala, y para ser sincera no me apena decirlo, porque e logrado, si así podría decirlo, que mi familia cambie a cada rato de lugar, a donde sea que iba me metía en problemas a tal punto que ninguna secundaria pública me quería, así que mis padres pagarán este ultimo año de secundaria para mi, no veo que hagan problema pues ambos son dueños de diferentes empresas. Mi madre es dueña de una compañía de servicios de katering, o algo así. Mi padre es dueño de una exportadora de café. No paso tiempo con ellos por sus apretadas agendas así que lo único que pueden hacer para "compensar" a mi hermano y a mi es darnos dinero.

Ha sido así desde que tengo memoria, prácticamente mi hermano era quien se encargaba de alimentarme y llevarme al jardín, pero desde que entré a octavo grado tipo 11 años dejó de hacerlo, pienso que fue allí cuando empecé a cambiar mi camino, no había persona que me cuide o vigile, así que empecé a meterme en problemas, nada mayor solo pegaba a los niños que eran malos conmigo. Cuando entré a primer curso de bachillerato, odiaba a la gente no sé porque, simplemente los veía felices  y eso no me gustaba, veía como sus padres los cuidaban y arreglaban sus mochilas para ellos, mientras que para mi no había nada.

Me encantaba el hecho de golpear personas, era como un placebo para mi, me relajaba, me metía en problemas por pura costumbre, en realidad no quería llamar atención de nadie, solo quería disfrutar del sufrimiento de los demás, pero mis "bromas" no llegaban a mayores. Hasta que realmente empecé hacer cosas mayores, como gritar a los profesores si me regañaban por quedarme dormida en sus clases, me salía de clases, escondía las cosas de los demás chicos de la clase por lugares recónditos.

Mi chico correctoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora