ʙᴀɴɢᴛᴀɴ ᴏs ♡

Yoonkook

—Ya saben dónde está el dinero, manténganse siempre en contacto y avisen donde van a estar. Nada de fiestas, nada de traer chicas a la casa.—Dijo la madre de los hermanos Min, ambos la miraban desde el sofá de la sala, ya se sabían ese discurso de memoria.

—Si, mamá.—Dijeron al unísono.

—Los amo, cuídense.—Dijo dejando un beso en la frente de cada uno y saliendo por la puerta, de su padre ya se habían despedido hace rato.

Era costumbre que ellos viajaran seguido, eran dueños de una empresa que era altamente solicitada por muchas otras empresas de diferentes países, así que no era nuevo tener la casa sola cada tres semanas.

—Pediré pizza, ¿De que la quieres,
mocoso?—Preguntó Yoongi parándose del sofá mientras tomaba su móvil marcando el número de la pizzería que frecuentaban.

—Lo de siempre.—Dijo Jungkook cambiando canales buscando algo entretenido para ver.

Yoongi hizo la orden para luego caer encima del menor, con sus piernas sobre las de él y su cabeza en el borde del sofá.

Luego de unos quince minutos llegó su orden y se dispusieron a comer en la sala de cine, verían una película, hace tiempo no compartían tanto tiempo juntos, siempre andaban de fiesta o cada quien en sus propios asuntos, esto era a causa de un pequeño encuentro que tuvieron hace unos meses y ambos estaban muy avergonzados como para enfrentarse.

—Flashback.—

Jungkook estaba en su habitación, eran las tres de la mañana y él no podía conciliar el sueño, había una tormenta afuera y él le tenía cierto temor a aquello, después de dar varias vueltas en la cama, decidió ir a la habitación de su hermano.

Tocó la puerta lo más silenciosamente posible, escuchó movimiento y dio gracias a Dios que estuviera despierto. Yoongi abrió la puerta un poco adormilado y lo miró.

—¿Qué sucede, mocoso?—Dijo con su voz ronca, lo despertó.

—¿Te desperté? Lo siento, hyung.—Dijo bajando la cabeza un poco sonrojado.—Es solo que...no puedo dormir.

—Entra.—Dijo volteándose y dejándose caer en su cama de nuevo. El menor cerró la puerta detrás de él y se acostó en el espacio que el mayor había hecho para él, cerró sus ojos dispuesto a dormir finalmente, pero un fuerte estruendo hizo que abriera sus ojos de par en par y temblar del miedo, tal vez tenía dieciséis años ya, pero es un trauma que traía consigo desde pequeño.

Sintió a su hermano tomar su brazo y atraerlo mas él, lo volteó para que estuvieran cara a cara y así poder abrazarlo. Jungkook casi abre un hoyo en el pecho del mayor, los truenos no paraban y cada vez eran mas fuertes, estaba muerto del miedo.

—Duerme ya, no pasara nada, estoy aquí.—Dijo Yoongi dando sutiles caricias en la parte baja de la espalda de su tembloroso hermano. Sintió como se relajaba más con sus caricias y respiraba más tranquilo en su pecho, igual temblaba un poco con cada trueno, pero al menos ya no era seguido.—¿Quieres agua?—Preguntó alejando un poco su rostro de su pecho y quitando algunos cabellos salvajes que tapaban la vista del menor, éste asintió lentamente pero no dejó que el mayor se alejara, tenía su camisa en un puño.

—Espera, no te vayas, mejor quedémonos aqui.—Dijo volviendo a esconder su rostro en el pecho del mayor, sintió como este reía un poco, pero no se negó.

—Eres un miedoso.—Dijo con diversión en su tono, conseguía tierno ese miedo que su hermano le tenía a las tormentas.

—Déjame, idiota.—Susurró mordiendo el pecho del mayor en venganza.