Small silence | SooHun

♡ S E I S

  — ¡Las tenemos!

La dulce e irritante voz de Baek se escucha tras el auricular y Minseok se siente contento porque tienen las seis malditas entradas que el señor policía les había quitado.

  —  ¡Me duele todo mi hermoso cuerpo!

Dae está quejándose sentadito en la acera, afuerita del teatro mientras se talla los dedos de los pies y después los ojos. Baek Hyun ya ha colgado y ahora es tiempo de que ambos se formen para entrar y apartar lugarcito, aunque por lo visto, serán los últimos.

  —  Ya vienen en camino.

  —¡Que bueno! Yo solo quiero que el pinche tecolote ese sea realmente tan guapo para Hunnie en la vida real como en los pósters photoshopeados.  

  — El man es guapo.

— "Pues ya veremos" dijo el ciego.  

Min ríe abrazándose al cuello de JongDae quien no entiende cuál es la gracia, porque después de estar en la estación de policías por más de siete horas, ahí sentadito en la fría cama de cemento que los ingratos ponen como castigo y que la vieja esa quisiera también violarlo, no le encuentra gracia a nada.

  — Gracias por protegerme, Dae.

Pero el suave aliento de Min golpeando su cuello y la forma en que después besa su mejilla, la bonita sonrisa en esos labios rositas y esos ojitos divinos que su novio se carga calman su mal humor y le regeneran las fuerzas. 

  — No fue nada, no iba a dejar que alguien te pusiera una mano encima, ¡sobre mi cadáver!  Tengo que cuidar de tu tesorito hasta que me dejes abrirlo.

  — ¡Dae!

— Vamos a formarnos, que ya es hora de conocer al maldito desgraciado que nos hizo hacer toda esta pendejada.

— O sea, al guapo actor Do KyungSoo.

— Al tecoSoo.

 Min niega. Todavía no puede creer que Yeol se atreviera a llamarle a su tío político, el señor alcalde para que los sacaran de la estación de policías, ¡el alcalde Wu Yi Fan y su distinguido primer damo, los habían ido a buscar personalmente en su limusina!

La cara de vergüenza cuando el señor, o posiblemente señora ya que nadie sabía qué era, le había dicho que él también hubiese hecho de todo por el pequeño Hunnie, ¡que él le habría comprado personalmente los boletos para conocer al actor Do! 

  — ¡Awaeee! La cola está enorme.

—¿La cola de quién?

— ¿Cómo que de quién? La fila Minnie, o sea, enfócate, desde ahora no más fallas, debemos cumplir esta misión para la nación. El futuro está en nuestras manos.

Dae da el saludo militar, Min se limita a rodar los ojos pero se abraza a su novio. Esconde su rostro contra su pecho y se queda ahí avanzando a pasitos de tortuga en la larga fila. 

El sonido de un claxon bastante familiar le saca de sus ensoñaciones donde Dae le canta al oído y le dice, así bien bonito "amorcito corazón" y que tiene tentación de un beso, que se pierda en el calor de su gran...