Cuando Harry despierta, lo primero que siente es el dolor completo en sus extremidades. Está dolorido de pies a cabeza y se ríe cuando siente el tirón que su estómago da al querer moverse. Ha pasado demasiado tiempo desde que había tenido sexo y aún más desde que estuvo horas haciéndolo, sin mucho tiempo de recuperación entre las rondas.
La segunda cosa que nota, es el frío a su costado derecho. Lo último que recuerda de la madrugada es al chico de ojos azules acurrucarse a su lado y suspirar en su oído cuando Harry acarició sus maltrechas caderas. Y ahora, ahora el sitio está vacío, frío y con un rastro del aroma de su perfume, tan leve, pero tan presente al mismo tiempo.
Como un recordatorio de la noche anterior.
La tercera cosa que Harry nota, es el sonido de la puerta cerrándose lenta y cuidadosamente. Sus ojos aún entrecerrados debido al cansancio, lo único que logran registras es la sombra de una figura pequeña desapareciendo tras la madera. Le toma un minuto reaccionar, abre rápidamente sus ojos e inmediatamente se pone de pie, ignorando el dolor de sus piernas y caderas. Recoge sus boxers y coge un pantalón deportivo de Dylan que está sobre su cama y sale de la habitación haciendo caso omiso al frío que le recorre de pies a cabeza al estar descalzo y con el torso descubierto. Corre escaleras abajo intentando ver hacia donde se ha ido el chico, pero no lo logra.
En cuanto llega al exterior de su residencia se da cuenta de que no hay absolutamente nadie cerca, no hay rastro del muchacho que Harry trajo a casa la noche anterior y que folló con tanta pasión. Ha desaparecido, dejando tras de sí a un chico desesperado por encontrarlo.
Llevando sus manos hacia su rostro para frotarlo totalmente lleno de frustración, Harry deja salir un sonido ahogado desde el fondo de su garganta. Esto es un asco, un completo asco ¿Por qué siquiera les hizo caso a sus amigos? ¿Por qué folló con alguien a quien no conocía? Harry no es así, no le gustan los encuentros de una noche, no una vez. Al rizado le gusta acurrucarse luego de alcanzar el orgasmo, le gusta despertar enredado entre las sabanas, en los brazos de la otra persona sintiendo el calor del cuerpo ajeno. Le encanta tomar una ducha y luego desayunar conversando y riendo.
Tener encuentros casuales está definitivamente fuera de su zona de confort y muy alejado de sus valores.
Negando, totalmente frustrado y molesto consigo mismo, decide que es inútil continuar fuera, sabiendo que William no volverá. Además, hace frío y el solo está vistiendo el pantalón deportivo de su amigo y compañero de cuarto y lo más importante no tiene zapatos puestos. Dejando atrás la acera entra nuevamente al edificio y sube perezosamente las escaleras, sus músculos protestando con cada paso que da.
Al llegar a su piso y a su habitación se da cuenta de un par de cosas importantes; la primera: su puerta está cerrada. La segunda: no tiene su llave consigo. La tercera: tampoco su teléfono móvil.
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Where Were You In The Morning? » l.s
Fanfiction❝ Donde Harry y Louis tienen una noche espectacular entre las sábanas y luego el ojiazul desaparece a la mañana siguiente, dejando al rizado devastado y deseoso de saber más sobre el pequeño chico lindo del club.❞ Portada realizada por: S- SILKTEARS...