Tipos de amor

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Midotaka

◭Mejores amigos◭

Shin estudiaba duro aunque las clases aún no comenzaban en la universidad ya estaba estudiando. Tenía una obsesión con ser perfecto en casi todo, ya que no podía ser perfecto como novio tendía a dejarme como lo último en su lista de cosas importantes, estaba en su habitación en la cama rodando molesto por la poca atención que no tenía. Es irónico no.

-Kazunari cállate.

-Mooo~ Shin~Chan deberías estar atendiendo a tu lindo novio.

-Estoy ocupado.

Amaba molestarlo ya que lo sacaba tanto de sus casillas tanto así que sus orejas se ponía rojas, quien no lo haría enojar se veía sumamente adorable. Me levante de la cama para tomar mis cosas, estaba ocupado y bueno mi trabajo de medio tiempo iniciaba en un par de horas.

-Me voy. Te amo, no estudies mucho Shin.

Me miro desconcertado, le sonreí cálidamente para darle un beso en los labios salí de su habitación, a mi linda zanahoria no le parecía que trabajara en un café, decía que era muy pobre el trabajo pero tampoco es como si tuviese la gran experiencia laborar para encontrar uno mejor, además que decía que era un desastre en la cocina.Cuando hacia algo para él prefería guardarlo estaba seguro que lo tiraba después pero no importaba lo acepta y agradecía que lo tomará. Eso llenaba mi corazón de alegría.

-Nos vemos Señora midorima.

-¿Te vas tan rápido kazu? ¿Peleaste con Shintaro? Ay ese Niño, lo regañaré de inmediato.

-No fue así, él está muy ocupado estudiando y no quiero molestarle más. Hasta luego.

Me despedí con un ademán para sacar mis audífonos, desencadene la bicicleta comenzando a pedalear al centro comercial. Mi trabajo consistía en ser mesero, aunque había días que tenía que estar en la barra, no es como si fuese guapo y muchas chicas decían que parecía atractivo o tierno pero solo eso, terminaban decepcionadas cuando les decía que era gay.

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-Que día tan aburridooo no hay nada que hacer, no hay ni clientes a esta hora.

-¿Qué te ocurre hoy? Te vez apagado es inusual viniendo de ti.

-Un idiota intento atropellarme, y alguien apretó mi trasero cuando estaba atendiendo las mesas.

-Deberías decirle al jefe sobre el acoso que recibes constantemente.

-No hará nada Kimura.

-Solo llevas dos semanas aquí y escuchado más quejas tuyas que de las chicas.

Era normal el acoso en la cafetería, por lo general yo atendía a los hombres o chicos para evitar que las chicas terminaran siendo atacadas pero varias veces terminaba siendo víctima de algunos toqueteos, no era normal en realidad seguía siendo incomodo creo que eso era más que obvio. Podía romperles la cara con un golpe directo en la nariz pero eso significaba ser despedido.

-Buenas tardes, bienvenido al café de Taeri ¿que le ofrezco de beber?

-Una rebanada de pastel y dos cafés por favor.

-¿De que serán los cafés?

-Uno cargado con leche y el otro como a ti te guste.- guiño el ojo, no pude evitar apretar la libreta con fuerza, por cierto era acosado más por chicas que chicos pero no estaba aquel volteado que quería hacer el listo.