-No hay discusión, no vas a arriesgarte de nuevo
-No es arriesgarme, es libertad. Eso no estaba en el contrato
-Clausula b inciso IV, cito "si alguno de los miembros de la agrupación conocida como ____, o todos sus integrantes tienen sospecha o han sido victimas de algún ataque que dañe o intente dañar su integridad física o mental, se tomarán las medidas de seguridad pertinentes para resguardo de dicho personal a menos que el grupo o el integrante pida su cesamiento". Si estaba.
Odio cuando Dorantes saca a relucir sus dotes de abogado en mi contra.
-Pero no necesito guardaespaldas
-No tendrás tanta suerte la próxima vez. Eres masoquista o suicida?
-No- solo no me gusta que me vigilen las 24 horas del día
-Pondré las cámaras de seguridad exceptuando los cuartos y tendrán guardaespaldas en la puerta día y noche, no solo por tí, ¿acaso ya olvidaste lo de Samuel? aún no sabemos quien tomo o editó las fotos. Tu situación es más sencilla de esconder, pues nadie ha dicho nada a los noticieros o a periódicos, esa gente del bazar es discreta, les conviene no notarse demasiado o los quitarían del pasaje, suerte que son gitanos y hippies. No habrá más discusión, pasado mañana te presentas en la agencia a las 7 am y ni un minuto tarde aún se te notan un poco los moretones pero ya llevas mucho retraso en las prácticas y los conciertos están a la vuelta de la esquina. Las normas de seguridad se implementan a partir de hoy y se acabó.
La pantalla de la laptop muestra el fin de la video llamada. Hasta en linea Dorantes me cuelga. Esta es la 4ta vez que hablamos del tema en estos 3 días y no hay manera de hacerlo retroceder. Lo sé, es mi agente, quiere que no me vuelva a pasar algo así, ni yo tampoco quiero, no creo tener tan mala suerte que me vuelva a pasar, no es que tenga alguna maldición ni nada, ¿o sí?
-Gracias
-Tómalo con calma, de todas maneras ya oíste, o se hace o te despiden. Además, yo estoy totalmente de acuerdo con él, alguien debe cuidarte
-perfecto! únanse contra mi! Seré un jilguero en una jaula de oro- suspire
-Pero el jilguero más bonito que existe- Sam me acaricia el rostro remarcando mis facciones, a detalle con suavidad y cuidado de no lastimarme pues aún me duelen los golpes que me propinaron aquellos bárbaros. Me mira fijamente y sé lo que está pensando, yo también lo pienso y aunque hay un poco de titubeo, al final , nuestros labios se unen tranquilamente después de todo este tiempo y toma mi cara entre sus manos como si fuera un objeto tan frágil que pudiera romperse al más mínimo contacto, son cuidado de no ser brusco, me besa suavemente, poco a poco nuestras lenguas se reencuentran y se reúnen en movimientos que expresan cuanto se extrañaron en este tiempo, como si hubiera sido una eternidad.
El día del "atentado" así le pusimos Sam y yo, pues fue terrorifico, Samuel llegó cuando Lucas ya se había ido, ¡gracias al cielo!, no comenté nada hasta el día siguiente que Dorantes habló en conferencia con todos y les explicó las nuevas normas de seguridad y después de media hora de discusión y que me colgara, tuve que contarles a los chicos el pandemónium que pase, sí, lo sé, quizá soy medio dramática pero el punto es, que después de ese momento, Sam estuvo más atento conmigo, a veces o veo distante y con la mirada triste hacia mi, pero cuando sale de sus pensamientos me mira con ternura y cariño, se expresó de la mejor manera de Lucas, después de quejarse del por que coño estaba en la ciudad, que creía haberse librado del "tipo", reconoció estar agradecido de que fuera así para poder ayudarme, algo es algo.
Un mensaje llego a mi celular
-Estas mejor?
-Si, gracias
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Corazón y Melodía (en pausa/reescribiendo)
Novela JuvenilEsta es mi historia, quizá no es sobre otros mundos, espías o poderes mágicos, pero es mi vida. Tal vez no sea la gran cosa, soy Darla, una chica como cualquier otra, con defectos y virtudes, con días buenos y malos; pero quiero compartirles las h...