Poco tiempo...

22 2 0
                                    

En una parte del anti void. Reaper y Geno acababan de llegar a la zona donde el creador se construyo una casa; jardín, árbol e incluso un paisaje para su deleite. Un pequeño lugar al cual llamar hogar.

― ¿Crees que Ink, se encuentre en su casa? ―pregunto, Geno, caminado detrás de la muerte.

― Y si no está. Arrojamos un bote de pintura en el piso y listo― respondió la muerte, al momento que decidió tocar la puerta.

Solo fue tiempo de esperar, unos cinco segundos para ser preciso y ser atendido por el pintor.

― ¿Diga? Reaper, Geno. ¿Qué les trae por aquí?― Ink, estaba emocionado al verlos, pero su visita era más que inesperado, incluso para él.

― ¿Podemos pasar? ―pregunto Geno. Se notaba serio en su voz, cosa que Ink lo noto. Se izo a un lado para darles espacio a sus invitados a que pasaran.

Tanto Geno como Reaper se sentaron en unos cómodos sillones del living. Ink izo lo miso, pero ubicándose en uno individual, enfrente de los susodichos.

― ¿Y bien? ―pregunto sin rodeo el dueño del hogar.

― Bueno. Quizás suene raro, pero... ―el semi muerto miro por inercia a su compañero. La verdad no tenía las palabras exactas para decir lo que venían hacer.

― Geno y yo, hemos tenido sueños raros y hemos venido a pedirte consejos.―comento Reaper sin ningún rodeo al asunto.

― Bueno. No sé cómo quieren que les ayude... ―comento, algo avergonzado y con la cara ligeramente, ruborizado en un tono multicolor― Es decir, jamás tuve ese tipo de sueño así que...

― ¡No ese tipo de sueño! ―grito Geno muy colorado. Tenía tanta vergüenza de que el pintor allá malinterpretado todo que no pudo evitar el gritar para que no siguiera con lo que iba a decir.

Reaper, por otra parte estaba también avergonzado, carraspeó un poco la voz y prosiguió.

― Ink. Los dos tuvimos el mismo sueño en donde una chica sale y nos grita por ayuda, además de que nos pide que busquemos a Dream y Nightmare.

Ink miro sorprendida mente a Reaper. Aquello no pudo haber sido otra mala interpretación. ¿O sí?

― La chica con la que soñaron... ―Ink mirando a los dos, esperando a que estos de una negativa a la pregunta que estaba por realiza― La chica... ¿Era alvina y con el cabello corto?

Miro atentamente, y al ver que ambos afirmaron a la misma vez, sin siquiera haberse visto o darse una mirada cómplice. Fue algo que preocupo más y más al guardián. Una cosa es que él y Blue hayan tenido el mismo sueño. Pero que allá más que lo tenga, ya era una señal alarmante de que tenían que hacer algo. ¡Pero ya!

― ¡¿Qué sucede Ink?! ―pregunto Geno, al ver como el mencionado se ponía en posición tomando su pincel gigante.

― Ahí que ir con Dream. ―menciono dibujando un portal― Esto ya no me gusta nada...

Mientras en DustTale. El lunático, caminaba por Snowdin; silencio, nieve y sangre con algo de polvo en el ambiente. Era perfecto para una caminata y estar de muy buen humor incluso para este Sans de mirada sicópata, era como un paseo por el verde florar.

― Que gran día para no hacer nada. ¿Verdad Paps? ―hablo en el aire, esperando una respuesta, pero sin recibir ninguna.― ¿Paps? Oye, ¿por qué no me hablas? ―siguió preguntando, pero nada. Silencia era lo único que escuchaba― Papyrus, ¡no es gracioso! ―grito, enfuscado.

Estaba alterado, tomo su cráneo con ambas manos. Odiaba aquel silencio, lo odia mucho. Pero ahí no acabo, el lugar se torno oscuro, muy oscuro y más silencioso de lo habitual.

― ¡¿Pero qué carajo?! ― grito, ya estando al límite de su enojo― ¡Nightmare, si esto es obra tuya te juro que...!

― ¡Ayuda!― se escucho una voz desconocida ante Dust― ¡Pronto, busca a Nightmare y a Dream!

Dust giro rápido antes aquella chica, viendo a una joven albina corriendo asía su dirección antes de abrir sus cuencas. Respiraba agitado, cansado e incluso podía jurar que sudaba frio, cosa que jamás sintió ni cuando peleo contra Chara.

― ¿Papyrus?― pregunto, temiendo no recibir respuesta alguna.

― Hermano, que bueno que despiertas...―escucho Sans, aliviándolo un poco antes ese temor.― Me tenías preocupado hermano, temblabas mucho. ¿Estás bien?

― Si... Solo, tuve una pesadilla... ―menciono a la nada, levantándose, ya que este estaba bajo un árbol donde decidió echarse una siesta.

― Sans... ¿A dónde vas?

― Voy a ver al pulpo. ―dijo, abriendo un portal― Ese maldito me debe una jodida explicación...―murmuro enojado, e incluso sus cuenca brillaban de la rabia que tenia...

Continuara...


La viajera de los sueñosWhere stories live. Discover now