YOU'RE MINE, derek luh.

015

Khalil

Eran las 1:30 a.m. de la madrugada no podía dormir casi, solamente dormía por unos diez minutos y me levantaba. Sentía que algo me lo impedía y estaba pendiente a mi celular, y no entendía el por qué.

Me senté en la cama y pasé mis manos por mi cara y pelo, suspiré frustrada y me quedé mirando el techo esperando una señal. Mi celular empezó a sonar, dí un brinco del susto y tomé el celular.

Llamada telefónica

— Ho-hola no-no p-paro de pen-pensar en tí, me tienes locooooo — dice un Derek borracho y alargando la "o".

— ¿Derek? ¿Dónde estás? — pregunté ya que se escuchaba música en el fondo.

— Noooo seeee — se empezó a reír a carcajadas.

— Estás con alguno de los chicos? — pregunté riéndome un poco.

— Con Di-dillon, ¡hit it Fergie! — dice cantando mientras se ríe.

— Dime donde estás que te iré a buscar — digo levantándome de la cama y buscando mis zapatos.

— Te voy a en-enviar la di-dirección babyyyyy — dice para luego colgar la llamada y dejarme con la palabra en la boca.

Salí de mi habitación silenciosa y bajé las escaleras, tomé las llaves de mi auto y entré al garaje. Me monté y encendí el auto, abrí la puerta del garaje y salí de casa. Mi celular sonó y era un mensaje de Derek con la dirección de donde estaba. Después de unos minutos conduciendo llegué a la casa, le envié un mensaje diciendo que estaba afuera esperándolo.

Lo ví salir de la casa tambaleando, me bajé del auto y caminé hacia él, lo ayude hasta llegar al auto. Abrí la puerta del lado del pasajero y con mi ayuda se sentó, como pudo se colocó el cinturón de seguridad. Cerré su puerta y caminé para mi lado. Me monté y arranqué y salí de ese barrio.

– ¿A tu casa? – le pregunté mientras iba guiando.

– A t-tu c-casa p-por f-favor – dijo como pudo, me reí levemente.

Prendí la radio y le bajé el volumen un poco para que la música no le molestara, lo miré de reojo y estaba mirándome mientras se mordía su labio inferior. Me removí incómoda a la atenta mirada de él.

— Me encantaría quitarte esa b-blusa — dijo cerca de mi oído, un escalofrío recorrió de la punta de mis pies hasta mi cabeza.

— Derek, acomódate bien — le ordené mientras le daba una rápida mirada para seguir mi vista a la carretera.

— Si mami — dijo riéndose un poco.

Negué la cabeza divertida, cuando llegué a casa estacioné el auto en el garaje y me quité el cinturón. Giré mi cabeza y lo ví acercarse lentamente, colocó una mano en mi regazo y sentí mi piel quemarse ante sus caricias. Empecé a respirar con dificultad mientras que él subía su mano poco a poco.

En un abrir y cerrar los ojos, ya me encontraba encima de él, con mi respiración agitada. Se acercó a mi cara hasta que nuestros labios rozaron. Lo miré a los ojos y ya él me estaba mirando, con sus dos manos me apretó las nalgas a lo que yo abrí mi boca. Aprovechó para rápido besarme en un beso suave pero a la misma vez salvaje. Le seguí el beso mientras ponía mis manos en su pelo acariciando su abdomén por encima de la tela de su camisa.

Metió sus manos dentro de mi blusa en busca de mis senos, una vez que los consiguió me dió un apretón a lo que yo gemí en voz baja. Me empecé a mover lentamente rozando con su miembro, poco a poco sentía su errección crecer. Con desespero le quité su camisa y él la mía dejando a la vista mis senos ya que no tenía sostén.

Se quedó mirando mis senos mientras los acariciaba, se llevó uno a la boca mientras chupaba y succionaba yo gemía mientras ponía mi cabeza hacia atrás. Como pude me levanté y me quité el pantalón corto, quedándome solo en bragas. Bajó su mano hasta mi parte íntima y empezó a tocar mientras me besaba el cuello.

Cada beso, cada caricia se subia de tono, en un movimiento rápido eché el asiento para atrás para así estar más cómodos, le bajé el pantalón dejándolo solo en boxer y su bien notable errección. Me mordí el labio mientras miraba como su errección crecía cada vez más.

— Me estoy desesperando — dijo a lo que rápido me quitó mis bragas y su boxer.

Me tomó por la cintura alzándome un poco para dejar un espacio entre nosotros y me bajó lentamente hasta que su miembro rozó mi entrada, aguantó su miembro con su mano pero yo se la quité para colocarlo bien en mi entrada, y me bajé más . Él me miró sorprendido a lo que su mirada cambió a una de placer. Empecé a subir y a bajar mientras que él tenía sus manos en mi cintura y nos movía en un ritmo rápido.

Empecé a brincar mientras los dos gemiamos, puse una mano en el cristal y la otra arriba mientras que brincaba más. Él se alzó y me acercó a su cuerpo mientras seguía mis movimientos, su cara estaba en mi cuello mientras mis dos manos las coloqué en su espalda atrayéndolo más a mí.

— Joder Khalil — gimió con voz ronca. Al escuchar su voz, me dió una escalofrío junto a una ola de placer.

— Ya.. me.. vengo — dije como pude mientras me seguía moviendo.

Llegué primero a mi orgasmo y después él, nuestros cuerpos desnudos en un baño de sudor con la respiración agitada. Nos miramos a los ojos y él me dió un tierno y suave beso.

— Deberíamos repetirlo — dijo con una sonrisa.

— Lo se — le respondí guiñándole un ojo.

Me quité de arriba de él y como pudimos, nos empezamos a vestir para salir del auto y entrar a la casa silenciosos. Subimos las escaleras hasta llegar a mi habitación y entramos, dejé mis cosas en la mesita de noche y me tiré en la cama.

— Ven — le dije dándole con mi mano a la cama, y él se acostó a mi lado y nos arropamos.

— Buenas noches babygirl — dijo en mi oído.

— Buenas noches — le dije antes de caer en los brazos de morfeo.