Nina seguía quieta, mientras Sara se columpiaba entre las espinas.
Sara observaba a su costado una máscara de papel. Y con curiosidad la acarició con sus dedos largos.
La máscara dejaba ver su pupila, se sujetaba sobre su nariz y el resto de su rostro, desde sus mejilla hasta su barbilla lucían su piel desnuda.
Con sus dedos largos, la acomodó
delicadamente en su rostro redondo.Cerró los ojos y se sentó al lado del banco donde el sueño de Nina dormía,
y procedió a posar sus cálidos y carnosos labios, sobre los lánguidos de porcelana.Los acarició con los suyos, como si se compadecieran y les brindaran calor, compañía.
Su lengua atravesó los labios de porcelana como résped, su lengua hacía cosquillas en la lengua helada de Nina, sus colmillos se enterraron en sus labios como los de una serpiente venenosa que la acabaría por matar.
Pero no le mató,
porque ya estaba muerta.Fue entonces que su boca sintió calor y despertó de su agotado sueño.
Y abrió los ojos para mirar
una máscara de papel.Sara se incorporó, Nina la miró abriendo los ojos, poco a poco despertándose.
Y ahora, ¿qué harían?
Simplemente se miraron. Ambas lucían confundidas.
La piel de Nina cada vez se parecía más a la de Sara, y Sara seguía con su máscara ante Nina.
“¿Es este quien me ha despertado?”, preguntó para sí. La pregunta resonó en su cabeza, como eco, como un constante acúfeno.
—Naamio(*), ¿en tus labios encontré un alma?
Sara tartamudeó, y sintió miedo de quitar su máscara.
—Nina, en mis labios encontraste un alma —Sonrió. Sus labios se doblaron y sus dientes se asomaron entre sus ligeras curvas de la boca.
Nina siguió entonces a Sara, pero no sabía quién Sara era. Para Nina, Sara era una máscara.
Sara andaba por entre bosques, y Nina corría tras ella.
Sara intentaba perderse entre los bosques, pero Nina seguía corriendo pese a tropesarse entre las ramas y golpearse con las piedras.* Naamio, "máscara" en finés.
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11 • 10 ♡
RandomLa princesa, conoce mitos de princesa: el embrujo desaparece, con el primer beso de verdadero amor. Pero Sara no sabía qué era el amor, y Nina estaba muerta. Para mi musa, @LaLoRen_