Con cariño... -Pennywise x Reader- 💕(En Pausa)

❣️-24-❣️

8:45 a.m.

<Solo he dormido aproximadamente 4 a 5 horas, me siento jodidamente cansada, me duele absolutamente todo, tengo costras de sangre en mi manos y piernas, algunas ramitas y hojas en el cabello, mi vestido esta lleno de lodo y sangre...
Vaya noche, jamás esperé que todo esto fuese a pasar...>

Cómo pude, decido levantarme sin ánimos de absolutamente nada, fatigada y con más sueño de lo habitual. Salgo de mi habitación en paños menores. Parece que mi ropa íntima fue lo único que se salvó de aquella noche catastrófica.

Cómo siempre, mamá aún no se levanta y es normal, la inspiración le suele llegar por las noches y es costumbre en ella dormir aproximadamente a las 3 de la mañana sabiendo que probablemente al día siguiente tenga algo en especial que hacer.

Esta vez no pienso despertarla, todavía no.
Entro a hurtadillas al baño y con cuidado abro la puerta evitando hacer algún ruido exageradamente ruidoso o llamativo, entro y cierro con el mismo cuidado.

Al mirarme frente al espejo del lavabo, logro percatarme del daño que me he hecho anoche, moretones en mis hombros y espalda, pero ¿En qué momento esto pasó?

Mi rostro estaba sucio, lleno de tierra y sangre, no me sorprendí en lo absoluto.
Me desvestí quitándome las pocas prendas que traía y dejándolas tiradas en el suelo.

Abrí la cortina junto con la llave de la regadera, esperando que saliese agua tibia. Sabia que si la abría demasiado fría, haría movimientos bruscos, provocando que me moviese y doliera aún mucho más mi cuerpo. Y si la habría demasiado caliente, mis heridas arderían y probablemente se abrirían sin aviso alguno.

Entre con cuidado evitando resbalarme, cerré la cortina y comencé a frotar mi cuerpo con cuidado para no lastimarme aún más. Me dolía el simple hecho de sentir las gotas de agua caer por mi cuerpo y rozando mi piel. No había de otra, tenía que hacerlo.

El agua al caer en mi cabeza, hizo que algunas hojas se callaran y con mis manos quite el resto. Con mi jabón frote en donde se ubicaban mis heridas para retirar cualquier residuo que pudiese infectar mi piel aún más.

Así pasó el tiempo hasta que por fin termine, el agua se había tornado de un color marrón claro y mi cuerpo dejó de lucir sucio al igual que antes.
El agua me había relajado, me sentía fresca, limpia, tranquila, calmada y sin preocupaciones.

Cerré la llave, abrí la cortina y también la ventana del baño para ventilar y que no hubiese tanta humedad.
Me puse mi toalla, rodeando mi cuerpo mientras que el agua de mi cabello escurría por mis hombros, frente y espalda.

Salí del baño dejando la puerta, no sin antes recoger mi ropa sucia.
Camine deprisa hacia mi habitación, entre y cerré la puerta con fuerza, pero evité azotarla antes de que hiciese un escándalo.

Me recosté en mi cama esperando volver a quedar dormida pero más tranquila y sin angustias.
Y así fue...

<Buenas noches de nuevo, mundo. Esta pequeña chica necesita descansar más...>