Con cariño... -Pennywise x Reader- 💕(En Pausa)

❣️-23-❣️

Caminando en círculos me la pasaba pensando en cómo demonios iba a volver a entrar a mi habitación. Me dolía la cabeza de tanto pensar, pero algo tenía que hacer para lograr entrar. Pensé en usar la correa del estuche de mi violín pero ¿Qué tan resistente iba a ser como para aguantar mi peso? Ademas no es demasiado larga como para alcanzar la ventana, a parte, ¿De donde se iba a sujetar?
Debía pensarlo mucho mejor...
¡Genial! ¡Tengo una mejor idea!

Volví a colocar mi violín en mi espalda, tomé mi ramo de flores y nuevamente comencé a trepar el árbol más cercano a mi ventana. Me subí hasta lo más alto, dolía el intentarlo, pero no había una mejor opción.

<Vaya noche... Me pregunto ¿En qué momento terminará esta pesadilla?>

De nuevo  aventé mi ramo de flores hacia mi ventana, esperando que entrara a mi habitación y así fue. Aventaría mi violín también pero haría demasiado ruido al caer al suelo, mamá se podría despertar y yo no quiero eso.

No estaba 100% segura de si esto saldría bien o si tan siquiera tendría el mínimo resultado de lo que espero... pero anteriormente me ha funcionado, así que... ¿Qué podría salir mal? Pero antes...

Harta de mi vestido, decidí quitármelo con frustración, estaba cansada de traerlo puesto, me molestaba, ya me sentía incómoda con él, así que me lo quite sin dudar y lo aventé como mi ramo de rosas hacia la misma dirección.

El frío me caló más el cuerpo, pero ya ni siquiera me importo.
De la nada me sentí molesta, frustrada, fatigada, agobiada, ya estaba cansada de esta noche, solo quería bañarme e ir a dormir.

Ese mismo coraje que sentía me hizo saltar nuevamente hacia mi ventana sin dudarlo. Casi me caigo, pero por suerte logré agarrarme de la orilla.

Me duelen las manos, me cansa más el aguantar mi peso en el borde de esta ventana, pero no había otra opción.

Ya no tenía fuerzas para siquiera intentar subirme y entrar de una maldita vez, pero como he repetido toda la put* noche, "No hay otra opción".

Me duele, me quema, me lastima, me arde el cuerpo de tan siquiera hacer el esfuerzo, pero nunca estaba de más el volver a intentar una y otra vez. Nunca es tarde para volverlo a intentar, tal vez no se obtenga el mismo resultado con el paso del tiempo, pero repito, nunca esta de más volverlo a intentar.
Lágrimas de mis ojos brotaban y se habrían camino rozando mis mejillas, lágrimas de coraje, un coraje que de la nada me dio fuerzas para poder soportar mi peso y lograr subir para poder entrar y acabar con todo.

Finalmente, por fin lo conseguí, ahora... ¡No vuelvo a escaparme de mi casa a estas malditas horas de la noche!

Tendida boca abajo en el piso, sin aliento, sin ganas de nada, me levante del suelo, recogí mis cosas, me quite mi violín de la espalda, las coloqué en mi cama y sin importarme nada, me acosté y quede profundamente dormida.

<Mañana será otro... día.>