Marinette Dupain Cheng, una joven adolescente tras un romance que se ve imposible.
Adrien Agreste, un chico adolescente y modelo quien también va tras un romance que se ve imposible.
Pero que ocurriría si los sentimientos que sienten por su amor n...
En la calurosa y hermosa ciudad de París, una joven de cabellos azabache se encontraba en la culminación de su nuevo diseño, un vestido de color azul con pequeñas motitas de color blanco, sujeto por dos tirantes, una culminación de dos faldas y para decorar, un cinturón.
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-Te ha quedado hermoso Marinette- dijo Tikki, dejando sus galletas para observar el trabajo culminado de su portador.
-Tiene razón Tikki, finalmente lo he terminado.
-Y justo a tiempo, ya queda solamente una semana para que las vacaciones de verano terminen.
La azabache dejo el dibujo a un para derrumbarse en su cama, estaba exhausta y a la ves decepcionada de que las vacaciones lleguen a su fin.
-No puedo creer que ya estén terminando, y solo he visto a Adrien una vez
-Bueno, sabes muy bien que tiene una vida un tanto complicada, pues, tener a un padre estricto y a la vez llevar una vida de modelo...
-Lo sé- dijo mirando de lado con la cabeza sobre la almohada- pero hubiese querido tener al menos una buena oportunidad de estar a solas con él...
-Marinette, recordemos algo...
-¿Qué cosa Tikki?- pregunto curiosa.
-Aunque por alguna obra del destino, lograras estar a solas con Adrien, lo único que lograrías sería balbucear- dijo la carmesí para luego soltar una carcajada.
-He tenido ciertos avances el año pasado- Marinette se había ruborizado.
La carmesí solo podía reírse del rostro de su portadora.
Una vez se detuvo, volvió a hablarle a Marinette.
-Y entonces, ya que estamos hablando de oportunidades en el amor...
-¿A dónde quieres llegar Tikki?- cuestiono la azabache.
-Es que Chat también a estado intentado algo contigo, tu misma te diste cuenta de eso cuando el había preparado todo aquel momento romántico para ambos.
-Bueno, no puedo negar que eso a sido muy tierno, y aunque le haya dicho que estaba enamorada de otra persona no se ha rendido, pero el quiere a Ladybug, y aunque que ella y yo somos la misma persona, te diré bien que no es así, ella es solo una máscara para la verdadera Marinette.
Marinette vio que Tikki había adoptado una expresión triste.
-Pero no es algo que me disguste Tikki.
Tikki se centró en ella.
-Ladybug puede que sea una máscara, pero es alguien con quien puedo tornarme alguien diferente, alguien con quien puedo realmente ayudar a las personas, es alguien que ha inspirado a muchos a seguir grandes sueños, incluso puedo decir que me ha inspirado a mí, y todo eso es gracias a ti.
-Marinette...- las lágrimas querían salir de los ojos de ambas, lo que las llevo a darse un pequeño abrazo.
-Y bien- dijo la Kwami limpiandose las lágrimas- ya está oscureciendo, será mejor que vayas a patrullar.
-Tienes razón- se levantó de la cama y se dispuso a transformarse- luego habrá un pedazo de pastel como recompensa.
-Acabas de hablar mi idioma- río Tikki.
-Tikki, motas.
Una luz roja cubrió el cuerpo de Marinette y Tikki se adentro en los aretes.
Una vez transformada, se dirigió rumbo al encuentro con Chat en la Torre Eiffel para luego iniciar el patrullaje.
